A José Luis Tirado Fernández
por la ayuda prestada.
En
esta entrada nos centraremos en una figura reconocida por la afición, si bien
existen algunos aspectos de su vida que han pasado desapercibidos y merecen
tenerse en cuenta para calibrar mejor sus valores flamencos. Se trata del
malogrado Francisco Leiton de Las Heras, más conocido por ‘Currito el de La
Jeroma’, cuya prematura muerte sesgó las potencialidades que atesoraba este
gitano jerezano privando al flamenco de su completa excelencia artística.
Currito el de La Jeroma.
(Reconstrucción fotográfica de Antonio F.
G.ª Rodríguez).
Currito
el de La Jeroma sería uno de los máximos exponentes artísticos de su familia,
cuyos miembros dominaron en mayor o menor medida todas las facetas
fundamentales del flamenco. Así pues trataremos de arrojar algo de luz sobre
estos antecedentes familiares de nuestro protagonista.
Linaje familiar de artistas.
Su
padre se llamó Juan Vargas Jiménez, artísticamente llamado Juan el de Alonso derivado a su vez del nombre de su progenitor. Su identidad fue descubierta hace tiempo en
investigaciones separadas tanto por Rafael Estéve como por José Luis Tirado. El hecho de que
Currito aparezca con los apellidos de su madre La Jeroma obedece a que Juan nunca
lo reconoció en vida, aunque sí, como veremos, tras la muerte del malogrado
artista. No hemos conseguido encontrar la partida de nacimiento de Juan el de
Alonso, aunque por las pesquisas de José Luis Tirado Fernández sabemos que en
un padrón de 1888 declara tener 21 años, por lo que habría nacido alrededor de
1867.
Por
el contrario sí hemos hallado la partida de una supuesta hermana suya de nombre
‘Juana’ nacida el jueves 12 de octubre de 1865 en la calle Rendona de Jerez,
siendo sus padres los jerezanos Alonso de Vargas y María Jiménez; sus abuelos
paternos Juan de Vargas y María de Seda ambos de Sanlúcar de Barrameda y los
maternos Manuel Jiménez y María García, ambos jerezanos.
De
otro lado, por el Empadronamiento General de Sevilla del año 1920, Juan Vargas
Jiménez, quien aparece domiciliado en la calle Tinajas n.º 4, declara tener 53
años situándose también hacia 1867 el año de su nacimiento. La teoría de José
Luis Tirado, que también comparto, es que quizá se hubiera inscrito por error a
este niño como “Juana” siendo en realidad Juan el de Alonso el de la partida
encontrada. Esta hipótesis tiene visos de verosimilitud ya que José Luis
comprobó en su tiempo que Juan Vargas Jiménez ‘el de Alonso’ no está inscrito
en los nacimientos de Santiago.
Con
respecto a su familia directa sabemos que Juan el de Alonso tenía unas tías
carnales, hermanas de su padre Alonso de Vargas Seda. Una de ellas era Juana de Vargas Seda quien fue cantaora
y bailaora y había nacido en el barrio de Santiago hacia 1850, puesto que en el
Padrón de Habitantes de Jerez de 1852, consta con 2 años de edad, cuando su
familia vivía en la desaparecida calle de La Orden. Como ya dijimos Juana estuvo unida
sentimentalmente al matador de toros gaditano Francisco Díaz García ‘Paco de
Oro’ (1840-1910).
La
otra era Soledad Vargas Seda que
había nacido
el domingo 3 de enero de 1858 en la calle Marqués de Cádiz. Fue igualmente
cantaora y bailaora conocida como ‘Soledad La Chata’ o ‘La Chata de Jerez’. He aquí su documento de fe de bautismo expedido el
día que vino al mundo:
Partida de bautismo de María de La Soledad Vargas Seda
‘La Chata
de Jerez’,
Tía por parte de padre de
Juan el de Alonso.
Soledad Vargas Seda ‘La Chata’ tocando la guitarra.
(Fotografía Emilio Beauchy Cano).
Jeroma La Gitana o La Morenita (Jerónima
Jiménez Heredia)
De
otro lado es importante tener en cuenta que la madre de Juan el de Alonso, llamada
María Jiménez García era hermana de Francisco, padre a su vez de Jerónima Jiménez Heredia. Por lo que
Juan el de Alonso y ella eran primos hermanos. Jerónima fue una gran bailaora y
también cantaora que en el profesionalismo de su época fue conocida por los
apelativos de ‘La Gitana’ y ‘La Morenita’, la cual, a pesar de su prometedora
proyección artística, lamentablemente moriría joven. Como ya adelantamos en
este blog –al hablar del cantaor José Barea ‘El Berea’-, esta artista había
nacido el sábado 30 de diciembre de 1865 en la calle Nueva n.º 24 de Jerez,
según constata su partida de nacimiento:
Partida de bautismo de Gerónima Jiménez Heredia ‘La
Morenita’;
Prima hermana por parte
materna de Juan de Alonso.
Por
algunas instantáneas del fotógrafo catalán Antonio Esplugas y Puig (1852-1929),
sabemos que había trabajado en el año 1882 en el Café La Alegría de Barcelona
ubicado en la calle Nou de la
Rambla, n.º 12. Hecho que corrobora José Blas Vega, quien
afirma que actuó en dicho establecimiento por dos años, triunfando con gran
éxito.[1] También
Emilio Beauchy Cano (1847-1928) la retrató en varias ocasiones en Sevilla:
Gerónima Jiménez Heredia ‘La Morenita’ o ‘Geroma La
Gitana’, hacia 1883.
(Fotografía de Emilio Beauchy Cano).
En
la entrada de este blog dedicada al cantaor José Barea ‘El Berea’, también desgranamos
el notabilísimo elenco flamenco que presentó Silverio para su café cantante de
Sevilla a inicios de 1882 y establecimos que estas artistas, familiares de Juan el de Alonso, llamadas Juana de Vargas Seda, su hermana ‘La Chata de Jerez’ y Geroma ‘La Morenita’ destacaban tanto en el cante
como en el baile:
En página 3 del n.º 44 de “El Toreo de Sevilla. Revista semanal de intereses locales, literatura,
espectáculos y anuncios”; domingo 8 de enero de 1882.
Sin duda es a la que se refiere Fernando el de
Triana, definiéndola como: “El colmo del arte y de la gracia”, y escribiendo de ella la siguiente semblanza:
“La Geroma.
Dueña y señora de la simpatía en el café de Silverio y
donde quiera que se encontraba. Como bonita y gentil figura, un monumento; y
como bailaora fue una cosa extraordinaria; puede sacarse la consecuencia por la
posición en que aparece en su fotografía.
También cantaba, y aunque en esto no era ninguna
lumbrera, lo hacía con una gracia singular, debido a un defecto de vocalización
(media lengua que decimos), y aquellas coplas que cantaba con tanto salero, no
había más remedio que aplaudirlas. Esta es la muestra de algunas de las soleares que
cantaba:
Sale el sol y da en er quistá;
cuando no quebanta ar vidio,
no sé qué va a quebantá.
Esto cantaba esa tontería de mujer con su ceceo
seductor (...).”.[2]
Néstor
Luján y Fernández (1922-1995) a la muerte de La Macarrona, recordaba de la propia Juana Vargas de Las Heras la siguiente opinión sobre la flamenca que nos ocupa:
“Gran bailaora
del café de Silverio fué también «la Geroma», personalísima y encendida de
brazos”.[3]
El Rojitas acompañando a la guitarra a Jeroma La
Morenita en Sevilla.
(Fotografía Emilio Beauchy Cano).
Como
vimos en la entrada de este blog dedicada a Los Macaca, Jerónima La Morenita
también actuaría como cantaora y bailaora en el elenco que Silverio presentó en
la sucursal de su café cantante en Huelva a inicios del mes de junio de 1885.
De este cartel destacamos otros nombres importantes a nuestro estudio:
“El día 3 del
próximo Junio darán principio los anunciados conciertos de cante y baile
andaluces en el salón del señor Silverio, situado en la barrio del Carmen, en
el que tomarán parte el siguiente personal:
‘Cantadoras’.-
Srts. Jerónima Jiménez y Regla
Jiménez.
‘Bailadoras’.-
Srtas. Jerónima Jiménez, Manuela
Peinado, Josefa Loreto, María Loreto, Concepción
Fernández y Regla Jiménez.
‘Bailadores’.-
D. Francisco Cortés y D. Miguel de la Cruz.
‘Cantadores’.-
D. Sebastián Fernández, D. Miguel de la Cruz, don Antonio Peinado, D. Francisco
Flores y D. José Ropero.
Además
tomarán parte las simpáticas bailadoras, niñas de diez años, la hija del ciego
Juan Manuel y Magdalena Sera, hija
de la Churra.
‘Tocadores’.-
D. Juan Ojeda (Conocido por el maestro Juan) y D. Juan Manuel Rodríguez
(Conocido por el Ciego).
La entrada
será libre por el consumo y habrá conciertos todas las noches.”.[4]
Como
claramente se observa y ya advertimos, en dicho elenco aparecen también, entre
las bailaoras las hermanas María y Josefa ‘Las Chorrúas’. Josefa era la madre
de una jovencísima Magdalena Seda Loreto ‘La Malena’ (1877-1956), que también
bailaba junto a la niña Salud Rodríguez Álvarez ‘Hija del Ciego’ (1873-1930).
Cruce de las calles Avenida de Portugal (izquierda) con
calle Carmen (derecha) y Jesús Nazareno (frente). En este entramado urbano
debió situarse la sucursal del café de Silverio en Huelva.
Como
decimos la carrera de ‘La Morenita’ se truncó pues padecía de tuberculosis
pulmonar, enfermedad antaño incurable, lo que provocó que la bailaora muriera
joven. Falleció el lunes 22 de julio de 1889, contando tan solo 24 años de
edad. Al momento de fallecer vivía en la calle Cantarería n.º 7 del barrio de
Santiago de Jerez, según recoge su acta de defunción:
Partida de defunción de Gerónima Jiménez Heredia.
(Registro Civil. Defunciones de Jerez de la Frontera).
Jeroma, la de Currito (Jerónima Leiton
de Las Heras)
De
otro lado, la madre de Currito se llamó Jerónima Leiton de las Heras y había
nacido el miércoles 2 de febrero de 1870 en el entonces antiguo arrabal de
Valle Sequillo de Jerez siendo bautizada en la Iglesia de San Miguel el mismo
día. Fueron sus padres Francisco Leiton y María de las Heras; abuelos paternos
José y Luisa de Vargas y los maternos Antonio y Jerónima Gómez, todos
jerezanos:
Partida de bautismo de Jerónima Leiton de Las Heraas
Madre de Currito el de
La Jeroma.
Según
los datos aportados por Adolfo Real Torregrosa entre sus primeras actuaciones habría que señalar las que realizó en el Café de la Vera-Cruz de Jerez en el año 1886 cuando
Jerónima Leiton de Las Heras contaba los 16 años de edad. Dicho local estuvo instalado
en la Plaza Romero
Martínez en parte de las ruinas del que fura convento franciscano del mismo
nombre, siendo entonces su propietario un popular cantaor jerezano por lo que
también fue conocido como “Café de Juan Junquera”. De lo referido
por el anciano investigador expresó Juan de La Plata:
“Las bailaoras de moda en el Vera-Cruz eran Juana la Macarrona, La Malena y La Geroma, las cuales gustaban
a rabiar”.[5]
Otras
actuaciones que de esta gitana hay que referenciar son las que tendrían lugar
en Linares hacia 1887. Y ello lo podemos afirmar merced al Padrón de Habitantes
de tal año, referido al distrito de Tetuán de dicha ciudad, en el que aparecen
domiciliados en la calle del Agua n.º 11 un gran número de “artistas”;
flamencos sobre todo de las provincias de Cádiz y Sevilla, que nutrían durante
esa temporada buena parte de los cafés cantantes de la localidad, como el
del Fomento
de la calle Carnecería, La Amistad sito en Sixto Cámara, El Industrial o de Marín en calle los Castillos y El Minero de la Plaza de San Francisco.
Padrón de Habitantes de la ciudad de Linares; año
1887.
Distrito de Tetuán, calle del Agua n.º 11.
Vemos
que en este documento aparece en primer lugar un cantaor jerezano llamado Francisco
Fernández Rivero, más conocido por El Petrolo (1855-1930), de gran repertorio y
estilista de guajiras, al modo del gaditano Juan Patrón López ‘El Guajiro’,
también reivindicado en este blog. Tras su paso por los cafés cantantes de Málaga,
los de la ciudad de Jaén –sobre todo el Café de Morales-, y La Carolina, hacía
un mes que había recalado en Linares, viviendo según el padrón en compañía de
la jienense Dolores Arteaga Medina. De él diremos como primicia que su nombre
artístico derivó de su madre, la sanluqueña Petrola Rivero Pinto; había nacido
en Jerez de la Frontera, el lunes 24 de septiembre de 1855 en la calle Santa
María de Gracia y murió en octubre de 1930 en la capital del Santo Reino donde
se afincó toda su vida, según se desprende de los datos hallados en la reciente
e importante tesis del amigo José Ramón Checa Medina.[6].
Francisco Bejarano Robles, en alusión a su etapa malagueña en los cafés de
Chinitas y Siete Revueltas o de Bernardo el Sevillano, comentó que solía cantar
esta letra en alarde de su especialidad:
“Señores, soy el Petrolo
que para cantar guajiras
me pinto como yo solo”.
Como
se observa, en este inmueble también estaban avecindados –desde un rango
temporal que oscilaba entre los dos años y el mes- otros artistas flamencos
tales como: Ángeles Luque Urbano, de Montilla (Córdoba); las hermanas Esperanza
y Rosario de los Reyes, de Sevilla; Pedro Roldán Delgado más conocido por ‘Perico
el de las Viejas Ricas’ (1869-1919) y Manuel Baro García –nacido en 1861, quien
vivía con María Rosado Velásquez y el hijo de ambos, Francisco-, el cual era
guitarrista y comparsista como el anterior, ambos de Cádiz. Figura además Trinidad
Navarro Carrillo ‘La Trini’ (1867-ca.1932), de Málaga, quien reside junto a
María Arenas Peña, su abuela materna adoptiva (dato que debemos a Eusebio Rioja
y que señala con acierto el amigo Rafael Estéve al estudiar el referido padrón
aunque con conclusiones divergentes a las nuestras).
Se
observa que aparecen Jerónima Loreto Seda que entonces contaba, efectivamente,
los 17 años de edad. A pesar de la variación en el segundo apellido, esta
flamenca no es otra que Jerónima Leiton de Las Heras, aunque consignada de ese
modo por parte del registrador debido seguramente a la pronunciación de las
gitanas.
Jerónima Leiton de Las Heras, madre de Currito.
(Fotografía de Emilio Beauchy que identifica esta
imagen con el nombre de “Geroma Loreto”,
ca.1885).
Las
otras dos son sus hermanas mayores: Antonia nacida en abril de 1867 y Juana de
Jesús –erróneamente consignada como Manuela-, que contaba entonces 25 años,
edad coincidente con su nacimiento en 1862.
También
hemos de aclarar que tanto La Chorrúa como su hermana Josefa, madre de La
Malena, a quienes hemos recordado trabajando en la sucursal del Café Silverio en
Huelva, a pesar de sus apellidos –Loreto Seda-, no tienen vinculación familiar
cercana con Juana Jesús, Antonia y Jerónima Loreto de las Heras, más allá de su
paisanaje jerezano. No obstante existe una importante fotografía de Beauchy que
conecta estos dos clanes de gitanas cantaoras y bailaoras:
Fotografía de Emilio Beauchy Cano hacia 1885 y que
tituló así:
“Antonia,
Geroma, María y Magdalena Loreto”.
Desde
la izquierda aparecen Antonia Leiton de las Heras, su hermana Jeroma –madre de
Currito- de pie y en postura de baile; a continuación, tocando la guitarra, la
bailaora María Loreto Seda (variación probable de los apellidos Leiton de las
Heras aunque como queda dicho nada tiene que ver con las anteriores), conocida
por ‘La Chorrúa’. Así, las hermanas Josefa y María eran hijas de José y
Magdalena, mientras que Jeroma y Antonia, como se ha visto, de Francisco y
María. Finalmente a la derecha de la imagen, sentada la niña, Magdalena Seda
Loreto ‘La Malena’, entonces incipiente bailaora y sobrina de la anterior. Según
José Luis Tirado la costurera de todas ellas era Josefa –madre de La Malena-,
quien en las Guías de Sevilla se anunciaba como tal cuando vivían en el
n.º 73 de la Alameda de Hércules.
La
fotografía está hecha en el gabinete de Emilio Beauchy Cano de la
calle de Las Sierpes n.º 20 de Sevilla. En esta ciudad se establecería años más
tarde La Jeroma, en la calle Lumbreras n.º 9, corral de vecinos, con su hermana
Antonia. Ésta convivía con un delincuente, llamado José Loreto Navarro,
hermano a su vez de Curro Charamusco quien, en el decir del portuense Alonso el del
Cepillo, bailaba muy bien, pariente a su vez de José Loreto Romero (1903-1970) divulgador en Jerez de una soleá-apolá de El Quino.
Rafael Pareja, en el “Capítulo V” de sus “Recuerdos
y confesiones” y en el apartado de anécdotas que titula “El viejo y el
nuevo “Burrero”.-”, al referirse a la segunda época del mítico café
cantante –de 1888 a
1897-, siendo por último su propietario un tal Manuel el Ecijano, la nombra
como “madre del buen cantaor y tocaor Currito La Jeroma”, dentro del
elenco de dicho establecimiento, y expresa:
“También actuaron Dolores “La Roque”, de Jerez, “La Rana”, “La Jeroma” (...), Lola y
Rosario (hijas del “Viejo de la
Isla”) y “La Camisona”.”.[7]
Otra de las comparecencias públicas de esta bailaora,
que podemos situar hacia 1892, la recoge Manuel Barrios al hablar de “La Jeroma –madre de Currito, le célebre tocaó-”,
cuando afirma que actuó en Lebrija, en la presentación de un jovencísimo Manuel
Torre, entonces “Niño de Jerez”, formando
parte de un cuadro que dirigía el tocaor Javier Molina, y en el que también estaban el bailaor El Enano y
el cantaor El Loli de Jerez.[8]
Teresa Loreto Seda (¿Teresita Mazzantini?)
Volviendo
al padre de Currito, Juan Vargas Jiménez, lo localizamos en el Padrón de Habitantes
de Sevilla del año 1895 domiciliado en la calle Niño Perdido, n.º 2 perteneciente
al distrito de San Martín, teniendo entonces por oficio el de “Desbravador” o domador de potros. Este
documento certifica que estaba casado con la jerezana Ana Seda Antúnez.
Conviviendo con ellos aparece una hija de Ana: Teresa Loreto y Seda fruto de su
matrimonio anterior con Manuel Loreto Vargas quien curiosamente era hermano del gran seguiriyero Joaquín La Cherna (1843-1908) y de
Tomasa, madre de los cantaores Pepe y Manuel Torre. También aparece una hermana
de Ana, llamada Josefa, a su vez madre soltera de una hija también llamada
Teresa. Queda decir que Ana tuvo otra hija con Manuel Loreto, llamada Luisa,
nacida en Jerez el 2 de octubre de 1867, aunque en el presente documento no se contemple. De otro lado Rafael Estéve en sus
investigaciones pudo comprobar que Ana Seda Antúnez era prima hermana de José
Seda de las Heras marido a su vez de Josefa Loreto Seda, padres de Magdalena
Seda Loreto ‘La Malena’.
Padrón de Habitantes de Sevilla, 1895. Calle Niño
Perdido n.º 2.
Pues
bien, la hija de Ana, Teresa Loreto Seda, nacida, según los datos expuestos
hacia 1872, fue una estupenda bailaora que cantaba notablemente, la cual, tiempo
después, marchó a Madrid. Se dio la circunstancia de que el torero guipuzcoano
Luis Mazzantini Eguía (1856-1926) la conoció en los cafés cantantes de la
capital y se enamoró de ella, pasando al poco a vivir juntos en la antigua calle
Alta de San Vicente n.º 16, en el distrito del Hospicio (entramado urbano entre
la calle Fuencarral y el barrio de Malasaña), como expresa el Padrón de Habitantes
de Madrid del año 1920:
Padrón de Habitantes de Madrid, 1920. Distrito del Hospicio; Barrio de San Pablo.
Calle San Vicente Alta n.º 16.
Según
este documento Teresa Loreto Seda nació el 6 de marzo de 1873, y habremos de
convenir que sus apellidos coinciden en cierto modo con las variantes que de
los mismos se producen con las otras flamencas tratadas; esto es: Leiton de Las
Heras.
Rastreando
pistas de esta mujer hemos encontrado, trabajando en el Teatro Novedades de
Sevilla, a una cantaora anunciada como “Teresa
Seda, «La Jerezana»” a inicios de
octubre de 1908. Esta misma flamenca aparece igualmente actuando en enero de
1917 en el Teatro Romea de Madrid integrando el elenco de Pastora Imperio,
según crónica del escritor y periodista madrileño Antonio de Hoyos y Vinent
(1884-1940), de la que destacamos los siguientes párrafos:
“...Aquel cuadro
sorprendente de color, aquella bárbara sinfonía que va desde el pañuelo rojo de
Pastora hasta el turquesa y siena que realza la belleza casi rubia, y, sin
embargo gitana, de Teresa Seda; aquel cuadro de luz en que las palmas corean el
desgarramiento de una copla y los suaves arpegios de la guitarra (...).
Y así, sobre
el fondo de jardín, incendiado de luz, a los acordes de la guitarra de Víctor
Rojas, de la guitarra que en sus manos suspira y canta -¡Oh, divina guitarra,
«caja de música, de duelo y placer», como te llamó el poeta!-, han ido
surgiendo Teresa Seda, de pomposa belleza, y «la Flamenca», grata y
apetitosa, y la gracia a impúber, casi andrógina, de Pepita y Eulalia García,
mientras que Juanito Valencia canta «con estilo», a clásico, y baila, como
nadie, Antonio Ramírez un baile primitivo y violento que tiene, a pesar de
todo, sorprendente elegancia de posturas. (...).”.[9]
Se
observa que, además de Teresa Seda, el grupo lo forman el cantaor Juan Valencia
Carpio ‘Mojama’ (1892-1957), y los bailaores Antonio López Clavijo ‘Ramírez’
(1879-1929) y quizá Lola La Flamenca la que fuera por años pareja de Faíco. De
tocaores, además del hermano de Pastora, Víctor Rojas Monje (1891-1957),
añadiré como absoluta novedad al linarense Antonio Romero Jiménez ‘El Tripa’
(1884-ca.1957), descubierto en la fotografía que acompaña al texto:
Elenco de Pastora Imperio.
De izquierda a derecha Juanito Mojama, a continuación
¿Teresa Seda?, Pastora Imperio, bailando y los tocaores Víctor Rojas y Antonio
El Tripa.
(Instantánea de “El
Día. Diario de la noche” de Madrid, 10 de enero de 1917).
Es
muy probable que esta Teresa Seda ‘La Jerezana’ fuese la Teresa Loreto Seda que
tuvo amores con Mazzantini por esta misma época de sus actuaciones en Madrid. Pero
llegados a este punto se impone una pregunta muy sugerente: ¿Es Teresa Loreto
Seda en realidad la tantas veces evocada cantaora Teresita Mazzantini? El hecho
cierto es que el primo hermano de esta gitana, Manuel Torre, en el año 1909 y acompañado
de Juan Ganduya ‘Habichuela’ (Odeón 68.110), registró un estilo de soleá que a
aquélla la tradición atribuye:
“Primita de mi
arma
mira qué
juntito estamos;
yo alcé los
ojos pa verte
los tuyos no
me miraron”.
Nunca
hubo consenso a la hora de determinar la identidad de esta importante cantaora,
y los datos arrojados al respecto nunca fueron concluyentes. Únicamente parece haber
acuerdo en que Teresita Mazzantini frecuentó los cafés cantantes madrileños,
aunque se ha dicho que era hija o sobrina del torero vasco, que su
nombre era Teresa Ross Uceda, natural del Puerto de Santa María y nacida en 1870.
Lo único que guarda tangencial parecido con nuestro argumentario es cierta
similitud entre los segundos apellidos manejados: Seda y Uceda.
En
1920 cuando Teresa Loreto Seda convivía con el diestro Mazzantini contaba
47 años y no aparece, al menos por el padrón manejado, con hija alguna a su
cargo. Así pues la teoría que asocia la identidad de Teresita Mazzantini a una
hija o sobrina del torero es endeble.
De otro lado existe un importante dato que Antonio
Escribano Ortiz recogió de la tradición flamenca de Madrid, si bien la historia
llega a él con la protagonista de la misma equivocada, al escribir:
“La Geroma fue
una cantaora-bailaora carismática, que con el derroche de arte y simpatía que
la caracterizaba se supo ganar al público madrileño cuando interpretaba su
bella soleá. Lamentablemente falleció en el año 1922, cuando gozaba plenamente
de las mieles de su gloria artística. Toda la afición de Madrid lo sintió y se
sumó dolorosamente a tan irreparable pérdida, afición que se ganó con su
rebosante humanidad y aplaudido arte”.[10]
De las dos Jeromas que conocemos, aunque no podemos
descartar que ambas pudieran actuar puntualmente en Madrid, no lo hicieron por
largo tiempo y mucho menos murieron en la capital de España. La Morenita, como
sabemos, falleció a finales de julio de 1889 y la madre de Currito, veremos que sobrevivió
a su hijo e incluso en 1950 aún vivía en Sevilla, cuando pasaba los 80 años de edad, aún domiciliada en su casa de toda la vida: calle Lumbreras n.º 9.
Así pues, la protagonista de la historia que presenta
Escribano, con visos de verosimilitud, no pudo estar referida a ninguna de Las
Jeromas hasta aquí estudiadas. Tampoco sabemos de otra artista de renombre y peso
en el cante por soleares cuya muerte calara tan hondamente en la afición
madrileña. Sin embargo sí podemos especular con la posibilidad de que la
flamenca fallecida en 1922 fuese la jerezana Teresa Loreto Seda, de quien
sabemos que en 1920 aún vivía en Madrid, la cual pudo fallecer al cabo de dos
años.
En este sentido cobra peso la hipótesis con visos de realidad que por primera vez aquí se presenta : que la bailaora y cantaora
Teresa Loreto Seda, y no otra, fue en realidad “Teresita la de Mazzantini”,
identificada con tal nombre al ser la amante del famoso torero.
El torero Luis Mazzantini
Aclarada
esta homologación casi definitiva de la cantaora nos reiteramos en establecer como posibles las comparecencias públicas de
Teresita Mazzantini bajo el nombre artístico de Teresa Seda máxime cuando de ella no hemos encontrado noticias más allá de las expuestas.
Currito el de La Jeroma y su tiempo
Por
el tiempo en que Juan Vargas Jiménez vivía en la calle Niño Perdido, se ganaba
la vida en ventas y colmados y era requerido en algunas fiestas de renombre que
se daban en Sevilla, incluso como cantaor. Salvador Carrasco al hablar de
Rafael Pareja afirma:
“En unión de
Chacón, Manuel Torre, Diego Antúnez, Juan el de Alonso cantó para los
Montpensier y casi toda la nobleza.”.[11]
E igualmente el propio Pareja recordaba eventos
en los que el padre de Currito participó:
“Una fiesta en casa de Murube, en la Alameda Vieja, o en
casa de otro señor aristocrático y aficionado de verdad de los que tanto
abundaban en Sevilla a principio de siglo. Allí, Chacón, Diego Antúnez, Juan
Alonso, Manuel Torre, La Niña
de los Peines, su hermano Tomás, “Habichuela” y yo.”.[12]
Una
de las más sonadas fiestas fue la que se organizó con motivo del matrimonio del diestro
Antonio Fuentes y Zurita (1869-1938), celebrado el lunes 16 de marzo de 1896,
en la que también participaron don Antonio Chacón y el veterano tocaor Juan Ojeda
‘Maestro Juan’ según “El Noticiero
Sevillano” del día después:
“Noticias
locales.- (.../...).
Como dijimos
oportunamente, anoche se celebró el matrimonio de la preciosa señorita Esperanza
Fuertes y el conocido matador de toros Antonio Fuentes. Competentemente autorizado,
bendijo la unión el presbítero D. Timoteo Álvarez Rivero, cura propio de la
diócesis de Toledo, apadrinaron á los contrayentes don Manuel Pérez y señora y
fueron testigos don Antonio Lasso y D. Manuel Retamosa.
Después de la
ceremonia se improvisó una alegre y clásica fiesta, proporcionando
agradabilísimo rato á los concurrentes los célebres ‘cantaores’ Chacón y
Juanillo Alonso, que acompañados con la guitarra por el maestro Juan, lucieron
sus facultades y buen estilo cantando flamenco admirablemente.
La reunión se
prolongó hasta la madrugada, sin que por esto decayese la animación un solo
instante. Asistieron cuantos amigos tiene el diestro en esta localidad (...). Todos fueron
obsequiados con esplendidez, saliendo muy complacidos. (...).”.[13]
El torero Antonio Fuentes.
Esta
boda fue muy sonada y tanto la prensa de Granada por un lado, como la de
Murcia, Málaga y Zaragoza..., del otro, coinciden en la especialidad cantaora
del padre de Currito, ya que al decir de Manolo de Huelva: “Este gitano era
otro de los grandes admiradores y amigos de Chacón”:
“...En la
fiesta, (puramente andaluza), se dió preferencia á lo que caracteriza á la
tierra de María Santísima, y hubo baile por seguidillas con todas las de la
ley, sentidas malagueñas cantadas por Chacón y Juanillo Alonso, y la ‘bebía’
consiguiente, dando preferencia á la Manzanilla y al Jerez.”.
“En la característica fiesta (por todo lo
alto) hubo baile y cante (jondo) como no podía ser menos, asistiendo, como lo
verificaron, los más famosos ‘cantaores’ de malagueñas Chacón y Juanillo
Alonso.”.[14]
Mientras
esto ocurre Jerónima Leiton en sus visitas a Sevilla paraba en la casa de su
hermana Antonia: Lumbreras n.º 9. Siendo Juan tocaor y cantaor, y ella
bailaora, sus caminos pronto hubieron de cruzarse, si es que no se conocían de
antes. Nunca se casaron aunque vivieran maritalmente, y en las postrimerías del
siglo XIX, en el año 1899 vino al mundo Currito. Aunque no hemos hallado su
partida de nacimiento sabemos que se produjo en Jerez, siendo probable que el
niño, durante sus primeros años, quedara al cuidado de sus abuelos maternos.
Aunque
nacido Currito, la actividad artística de su madre La Jeroma, no se detuvo, pues
se tiene constancia de sus comparecencias en la Tacita de Plata merced a esta
información del “Diario de Cádiz” del
jueves 2 de agosto de 1900:
“Anoche llegaron
de Sevilla y Jerez, los artistas flamencos que actuarán en el café del Bosque.
Hoy harán su segunda aparición.
Tales
artistas son: las cantaoras jerezanas Dolores ‘la de Roque’ y Geroma ‘Loreta’; la bailaora Rocío
Heredia ‘La Jitanilla’; los cantaores Teodoro Guerra ‘El Quiqui’ de Cádiz;
Antonio López ‘El Troni’ de Sanlúcar de Barrameda y el bailaor Antonio Muñoz
‘El Enano’ de Jerez.
El cuadro
citado es dirigido por Juan Gandulla ‘Habichuela’ de Cádiz. (...).”.
Según Manuel Fernández Moreno ‘Tío Parrilla’
(1908-1980), recordaba así a Juan el de Alonso:
“...fue un gran conocedor de todos los cantes de
su tierra y muy personal por soleá y siguiriya, cantes que transmitió a su
hijo, del que también fue maestro como tocaor”.[15]
La
primera noticia hallada de Currito de La Jeroma en torno a sus actuaciones en público aparece finalizando el verano de 1911,
concretamente el viernes 8 de septiembre. Así lo contaba “El Guadalete” al día siguiente, aunque no cite su
nombre expresamente:
“El “cine” de la
Alameda.-
Anoche debutó
en el ‘cine’ de la Alameda el dúo ‘Andalucía’.
Los artistas
interpretaron con bandurria y guitarra diferentes trozos musicales. (...).
También
tomaron parte una pareja infantil de baile y un niño que canta admirablemente
por flamenco.
Esta noche
además de los cuadros, todos estos artistas se presentarán en las cuatro
secciones.”.[16]
Este
cinematógrafo situado en la Alameda Vieja, se llamó Cine de la Caridad, ya que
los ingresos obtenidos del pase de películas que en parte se destinaban a obras
benéficas.
Imagen retrospectiva de la Alameda Vieja de Jerez de
la Frontera.
El
novel cantaor gitano volvió a lucir sus cualidades en esa misma serie de
actuaciones y la prensa recoge su nombre:
En página 2 del n.º 17.885 de “El Guadalete. Periódico de interés general”
de Jerez de La
Frontera; Martes 12 de septiembre de 1911.
En su faceta de cantaor lo
encontramos dos años después, en octubre de 1913, actuando en un cercano pueblo sevillano,
acompañado de la guitarra de José Crévola
Benedito:
“Lebrija.
‘Teatro’.-
Con gran éxito actúan el aplaudido cantador ‘Niño de la Jeroma’ y su renombrado
acompañante el célebre tocador de guitarra ‘Pepe Crévola’.
El público
premia la labor de ambos con grandes aplausos, y admira la ejecución y maestría
del guitarrista ‘Crévola’.- ‘El Corresponsal’.”.[17]
Peñita de Andalucía junto al guitarrista José Crévola.
(Fotografía del diario “Heraldo de Zamora”, 17 de
diciembre de 1918).
Recién
estrenado el nuevo año Currito sustituirá a Luisa Requejo en el Teatro Eslava
de Jerez. La prensa local informa del último recital de la cantaora con su
tocaor Javier Molina, quien pasara a acompañar al gitano cuya presentación en principio estaba anunciada el miércoles 14 de
enero de 1914:
“Teatro Eslava.
Buenas entradas hubo en este popular teatro en las
noches del Domingo y Lunes.
La aplaudida cantadora de flamenco Luisita Requejo
como el tocador de guitarra Javier Molina, gustan cada día más, siendo muy
aplaudidos todos los días.
Esta noche dará su última función la Requejo, y mañana debutará
«El niño de la Jeroma» acompañado de Molina. (...).”.[18]
Debido
a la lluvia esta comparecencia se pospuso al día siguiente, teniendo lugar finalmente el jueves
15:
“Teatro Eslava.
Anoche y
debido a la lluvia, se suspendió la función anunciada en este teatro.
Para esta
noche escogido programa de películas y debut del notable cantador flamenco ‘El
niño de la Geroma’, acompañado por el notable tocador de
guitarra Javier Molina.
Como todos
días y en todas las secciones habrá hermosos regalos en metálico.”.[19]
Currito cantaría en dicho coliseo hasta el domingo
18 de enero, anunciándose desde ese miércoles prácticamente sin variación, salvo el número de películas proyectadas entre seis y cuatro:
En página 3 de los ns.º 18.613 al 18.615 de “El Guadalete. Periódico
de interés general”
de Jerez de La Frontera; miércoles 14 al viernes 16 de enero de 1914.
La
crónica de estas primeras actuaciones del cantaor fue favorable, siendo
acompañado al día siguiente, sábado 17, según consta, por Cristóbal
Salazar (1887-1927):
“Teatro Eslava.
El éxito
conseguido en las noches anteriores por ‘El niño de la Geroma’, hizo que anoche
viéramos este teatro lleno en las secciones en que tomó parte tan aplaudido
artista. (...).
Gran Cinematógrafo.-
Función para hoy. (...).
A las 8.-
Popular.
Cuatro
películas por el cine y presentación del cantador de flamenco Francisco Loreto,
«Niño de la Geroma» acompañado por el profesor de guitarra Cristóbal Salazar.
(...).
A las 9 y
cuarto.- Sección doble.
Exhibiéndose
siete películas y nuevos números de cante por «El niño de la Geroma».”.[20]
Un joven Currito de la Jeroma cuando aún se prodigaba
como cantaor.
Como
primicia diremos que este tocaor era en realidad panadero en el barrio de Santiago,
oficio que alternaba con la guitarra, siendo muy apreciado su toque, en su
tiempo calificado como “flamenco fino”.
Su nombre completo fue Cristóbal Salazar y Correa Montes de las Torres; había
nacido en Jerez el 4 de agosto de 1887 y falleció en esta misma localidad de un
paro cardíaco el 6 de febrero de 1927.
Al decir de Tío Parrilla, quien lo califica como “artista redondo”, Currito fue uno de los primeros gitanos que en Jerez destacaron en el arte de la guitarra siguiendo las formas de Javier Molina, como máximo
exponente de «la escuela tocaora jerezana, en la que el uso del pulgar, tiene,
junto a la justeza y donosura del compás, una de sus más esenciales características
y peculiaridades».[21] No
obstante, en varias de sus primeras citas acompañando al cante, Currito
aparecerá junto a Salazar Correa por lo que hay que pensar que de él igualmente recibiera
nociones del instrumento, puesto que aquél también se dedicó a la enseñanza de
la sonanta en su tierra natal.
El
final de las referidas actuaciones en dicho teatro jerezano tuvo lugar el
domingo 18 de enero de 1914:
En página 3 del n.º 18.617 de “El Guadalete” de Jerez de La Frontera;
Domingo 18 de enero de 1914.
Actuación
que la
revista madrileña especializada “Eco
Artístico” resumía de la siguiente forma:
“Jerez de La
Frontera. (...).
‘Teatro
Eslava’.- Ha constituido un éxito verdadero la despedida del pequeño cantador
flamenco ‘Francisco Loreto (Niño de la Geroma)’. (...).- ‘El Corresponsal’.”.[22]
Publicación
que igualmente confirma que, a finales de ese año, Currito, acompañado de José
Crévola realizaría una serie de actuaciones por algunos pueblos gaditanos:
En página 22 del n.º 184 de la revista “Eco Artístico” de Madrid;
Viernes 25 de diciembre de 1914.
De
Currito se dice que fue perdiendo paulatinamente la voz dedicándose a la
guitarra. Es posible que algunas de sus primeras incursiones ya como tocaor se
dieran en un emblemático café cantante jerezano según Juan de La Plata quien describe su ambiente y los cantaores que allí recalaron:
“La Primera de Jerez.-
Este “café”
se fundó en el año 1908 en la parte alta del restaurante que existió con el
mismo nombre, y fué su propietario un montañés llamado don Ricardo Díaz Torres.
En este salón, que duró varios años y alcanzó gran prestigio, actuaron los más
famosos artistas flamencos. Cantaron don Antonio Chacón, el puntal más firme
del cante de todos los tiempos; Manuel Torres, al que esperaban todas las
noches un gran número de gitanos, sentados en los bordillos de las aceras de la
calle Doña Blanca, que era donde estaba el citado “café”, con entrada por Unión
y que se volvían locos cuando escuchaban al “Niño de Jerez” cantando aquellas
“siguiriyas” que le dieron tanto renombre (...).
Junto a estos
dos emperadores del arte cañí debemos también citar al famosísimo “Juan Breva”
–¡un genio!-, que además de cantar, él mismo se solía acompañar con la
guitarra; al “Cojo de Málaga”; Cepero, al que llamaban “El poeta del cante” por
lo sentimental de sus coplas; la extraordinaria Pastora Pavón “Niña de los
Peines” y la gaditana Inés Ortega “Niña del Columpio”, una gitana blanca muy
guapa (...).
Como tocaores
de guitarra, sabemos que actuaron en “La Primera de Jerez”, el actual decano de
los guitarristas españoles Javier Molina; el popular “Habichuela” y el “Niño de
la Jeroma”, entre otros artistas muy conocidos en aquella época. (...).”.[23]
Intersección de las calles Doña Blanca y Unión en las
que se puede apreciar, a la derecha de la imagen, el edificio que albergó ‘La
Primera de Jerez’ que ocupaba los altos del inmueble. (Archivo Juan de la Plata).
En
Jerez por el Padrón de 1914 sabemos que vivía junto a su madre La Jeroma en la
calle Justicia n.º 22: Padrón de Habitantes de Jerez de la Frontera; año 1914.
Calle Justicia n.º 22.
Del
gitanillo, que potenciaba cada vez más su faceta de tocaor alternando con el
cante, no tenemos noticias hasta finales de 1915, en que, a raíz de un revuelo provocado
en Jerez por un desmandado toro, puede constatarse su participación en cierta
fiesta flamenca, interrumpida por tal causa en un establecimiento situado en la
confluencia de las calles Arcos n.º 1 y Honda n.º 2:
“...Estévez, el
encargado del restaurant ‘El Colmado’, en previsión de que entre en el
establecimiento tan raro cliente, cierra las puertas del mismo, de donde salen
estos artistas noctámbulos a quien todo Jerez conoce: Cristóbal, Perico el del
Lunar, El Niño de la Jeroma, El Loli, El Chuti, Labios, Cara Piedra, etc. (...).”.[24]
Ahí
aparecen un joven Pedro del Valle Pichardo ‘Perico del Lunar’ (1894-1964) quien,
junto al señalado Cristóbal Salazar, oficiarían de tocaores. Entre los
cantaores, además del joven Currito, aparecen Manuel Lobato ‘El Loli’ quien
destacara por malagueñas y farrucas, Francisco Santos ‘El Chuti’, conocido
fuera de su tierra como ‘Niño de Jerez’ y uno de los primeros intérpretes
reconocidos de las bulerías; José Niño Loreto ‘Carapiera’ (1882‑1931) quien impuso
una particular cantiña de cuño propio, señalada a veces como ‘soleá de cambio’.
También
el periodista Rafael del Pozo Roldán ‘Don Braulio’, recordaba estas reuniones
que se daban en el referido local, además de ofrecernos un muy poco conocido testimonio
de los últimos años del gran cantaor jerezano Antonio Vargas Fernández
‘Frijones’ (1846-1917):
“...Fechas
inolvidables de mis años mozos, que al tener a mi diestra a José María
Rodríguez, venían a mi memoria, con aquella pléyade de artistas simpáticos que
se llamaron Cristóbal Salazar, ‘El Chuti’ y ‘Carita de Piedra’, un flamenco tan
bueno como el mejor.
Cantaba
entonces Luisita Requejo y la hacían son, arrancando las notas más
sentimentales de sus guitarras, ‘Perico el del Lunar’ y el pobrecito de
‘Currito el de la Jeroma’.
Y aún, sobre
los quicios de las puertas de ‘El Colmado’, cuando lo llevaba D. Vicente de los
Toyos y estaban a sus órdenes el bonachón de Estévez, el obeso ‘Casiveo’ y el
inquieto Vicente Callejo, que ha vuelto a Jerez después de cinco lustros;
todavía ‘Frijones’, que fue la admiración de los aficionados al cante ‘jondo’,
paseaba su miseria y su pobreza para que se le tendiera una limosna, entonándose
por soleares, cual un gramófono enfermo sobre el que se hiciera girar una placa
vieja...
«Dichosa edad
y siglos dichosos...» (...).”.[25]
El guitarrista jerezano Perico del Lunar’.
Estas
reuniones igualmente las corroboró Juan de La Plata en el referido local “El
Colmado”, coincidentes en el tiempo en que fuera su propietario el montañés
Alfonso Riquel Pérez, cuando afirma:
“Aquí
acostumbraban a parar toreros, ganaderos, tratantes de ganado y ricos
labradores, los cuales solían llamar a sus reuniones a conocidos artistas,
entre ellos, principalmente, al guitarrista Cristóbal Salazar y a los cantaores
“Carapiera” y “Luis la Maora”,
que eran los más asiduos al local”.[26]
Antigua imagen de la calle Arcos de Jerez de la
Frontera. El primer edificio de la derecha se correspondería con lo que fue “El
Colmao” haciendo esquina con la calle Honda.
Algo
más de un año más tarde, en enero de 1917, aparece quizá por vez primera
Currito oficiando como guitarrista en una fiesta en Jerez, según recoge el
diario local “El Guadalete”:
“Una gira.-
El simpático
industrial D. Manuel Pozo Ríos, para celebrar su fiesta onomástica, ya que se
vió privado de hacerlo el día de Año Nuevo, por atenciones del negocio,
obsequió el Sábado anterior con una gira, en la viña de San Rafael, a todos su
íntimos. (...). De vino se hizo un gran
derroche, no faltando ni un momento el «dorado líquido», de entre los
recipientes que al efecto se llevaron los reunidos.
Se dedicaron
algunas horas a la ‘juerga’, que no hay que decir que estuvo animadísima, si se
hace constar que asistieron los aplaudidos cantadores
de flamenco «Isabelita la Jerezana», «Cabeza» y «Chicharito» y el
excelente tocador «Currito er de la Jeroma».
Los reunidos
hicieron grandes elogios de la viña, a cuyo cargo corre el veterano capataz
Antonio Sánchez y que está considerada como una de las mejores del pago. (...).”.[27]
Currito el de La Jeroma.
Sabemos
que de un tiempo a esta parte iba y venía Currito de Jerez a Sevilla, y en esta
ciudad lo conoció La Niña de los Peines cuando aún adolescente acompañó en
alguna que otra fiesta a su hermano Tomás Pavón. Su toque agradó en extremo a
Pastora, tanto es así, que ese mismo año de 1917 contó con él como guitarrista para sus registros en la casa Odeón. Grabó Pastora un variado abanico
de cantes: soleares (dos tandas), tientos (dos tandas), seguririyas, tarantas,
cartageneras, bulerías, alegrías, peteneras, fandangos alosneros, farruca,
garrotín, guajiras, rumbas, vidalitas, pravianas por bulerías y sevillanas. En
estos registros llama poderosamente la atención el alzapúa y la calidad del toque rítmico
del hijo de La Jeroma.
De
sus capacidades como guitarrista hay que destacar la opinión de Fernando
Rodríguez Gómez ‘el de Triana’ (1867-1940), al compararlas con las del madrileño Luis Casimiro Molina Jiménez ‘Luis Molina’ (1883-1919):
“Currito no era tan extenso en repertorio como
Luis, pero ¿qué tenía su toque? Hay veces que los cantaores no tienen ganas de
cantar y van a salir del paso, pero con Currito no podía ser esto, pues a las
notas de su guitarra no había más remedio que entregarse y cantar cada uno lo
que sabía. El arte supremo del gran artista arrancaba a los cantaores toda la
cantidad de arte y facultades que poseían.
Yo aseguro que mejor que estos dos artistas de la
guitarra no ha tocado nadie para cantar.”.[28]
También
el barcelonés Domingo Prat (1886-1944) expresó:
“Currito de La Jeroma es, hoy uno de los tocaores más
destacados, barajando su nombre con los de Montoya, Yance, Borrull, etc. Su
arte, que desarrolla en la guitarra, supeditado a la rama del folklore hispano,
es apreciado, además de su larga presentación personal, en la grabación de
discos. Su manera especial en el toque ha hecho que tenga entusiastas
admiradores”.[29]
Y nuevamente el cantaor Rafael Pareja, en el “Capítulo
VIII” de sus “Recuerdos y confesiones”, le ensalzó en los siguientes
términos:
“Tocaores y concertistas.- (...).- Currito el de la
Jeroma. (...).
Antes de terminar este capítulo he de hacer resaltar
también las cualidades de otro tocaor, de Jerez, hijo de “La Jeroma”, conocido por
“Currito el de la Jeroma”
que acompaña “como se debe acompañar”, quizás debido a que canta tan bien como
toca”.[30]
A
inicios de junio de 1919 hay que reseñar su participación como guitarrista en la
velada que por razones de enfermedad se tributó en beneficio del antiguo y
célebre cantaor Antonio Silva Estrada ‘El Portugués’ (1851-1920) en el Salón
Variedades de Sevilla. El gitano tocaor fue anunciado como “Currito
‘El Niño de la Jeroma’,” en un magnífico cartel conformando por un
plantel de artistas de categoría que ayudaron a la consecución de tan noble
fin:
Manolo
El Carbonero no era otro que El Niño Ricardo (1904-1972) y Antonio García
–Matos de segundo apellido- era en realidad un joven Antonio Triana (1906-1989).
Tanta
fue la fama de Currito en ese tiempo que incluso Eugenio Noel, le nombra como “Niño de la Jeroma”, en su libro “Señoritos chulos, fenómenos, gitanos y flamencos”, publicado ese
mismo año, donde reproduce una soleá corta que al parecer cantaba:
“Si San Leandro o
San Gregorio resucitaran y oyeran al Niño de la Señá Geroma, se
volverían a morir de nuevo al escuchar aquello de:
“Mira si
tendré talento
que puse una
barbería
enfrente el
ayuntamiento”. (...).”.[31]
El trianero Manolo Oliver Dorado (1906-1989) también recordaba las soleares de Currito cuando él mismo se iniciaba como cantaor:
“También
m’acuerdo que en el bautizo de una prima mía, mi prima Ana, escuché cantar por
primera vez a Currito el de la
Geroma, que cantaba por soleá que quitaba el sentío, pero no
cantaba la soleá de Triana, ¡mucho cuidao! que pá cantar por Triana había una
raya en el puente que pá pasarla... Que Currito era cantaor pero después se
puso tuberculoso y pa ganarse la vía cogió la guitarrita y entonces empezó a
tocar la guitarra... Que se iba al Charco la Pava, en el camino de San Juan, y ahí se buscaba
la vía... totá que después de cantar el de la Geroma, pues mi tío y mi padre me dijeron que
cantara. Y yo canté las soleares a mi manera, las de Triana, claro. Y m’abrazó
Currito y se formó el alboroto...”.[32]
Como
podemos ver, por esa época, hacia el año 1920, el padre del gitano tocaor, Juan el
de Alonso, vivía, como se ha dicho en la calle Tinajas n.º 4 de Sevilla, y por la
hoja del Padrón declara tener por profesión la de “Artista”:
Padrón de Habitantes de Sevilla, 1920. Calle Tinajas
n.º 4.
De ese tiempo José Blas Vega deja constancia de una
fiesta celebrada en 1921 en Sevilla auspiciada por Ignacio Sánchez Mejías
(1891-1934), y ofrecida, entre otras personas, a un diplomático conocido por don
Aurelio y la actriz argentina Camila Josefa Ramona Passera ‘Camila Quiroga’
(1891-1948). De los flamencos se encontraban el Hijo de la
Jeroma de tocaor, Aurelio Sellés y don Antonio Chacón, quien al acabar la
fiesta y viendo que el torero daba algo menos de dinero de lo que los artistas
merecían, le espetó sin miramientos: “Traiga aquí, que no sabe pagar...”.[33]
Finalizando
ese año encontramos a Currito en un conocido salón de varietés situado en la
calle Calatrava, n.º 25 de Sevilla donde también se ofertaba flamenco. En este
caso, junto al veterano tocaor cordobés Antonio Moreno Fernández (1872-1937), maestro
del Niño Ricardo, acompañaba el cante del granadino Miguel Milena Rosales
(1895-1941), nacido en el pueblo de Colomera:
“Sevilla. (...).
‘Ideal
Concert’.- En este salón actúan las bailarinas ‘Carmen Lastra’, ‘Pepita
González’ y ‘Lolita Campoy’; la pareja de bailes ‘Hermanas Iris’, la
cancionista de aires regionales ‘María de Albaicin’, que podrá llegar a ser
algo cuando tenga más voz y arte; la excelente artista ‘Carmen de Granada’, que
con su derroche de gracia, hermosura y arte electriza al público; el famoso
cantador de flamenco ‘El Niño de Granada’, acompañado a la guitarra por los
profesores ‘Antonio Moreno’ y ‘El Niño de la Jeroma’. Se despidió, después de
haber gustado mucho, la cantante de aires regionales ‘Pilar Jienense’. (...).-
‘Pepe Conde’. (...).”.[34]
El gran guitarrista cordobés Antonio Moreno.
Por
lo que se ve también coincidió por ese tiempo y dicho establecimiento con su padre
según recoge el corresponsal de la revista madrileña “Eco Artístico”:
“Sevilla. (...).
‘Ideal
Concert’.- En este concert actúa un cuadro flamenco bajo la dirección de
‘Manuel Ortega Caracol’, y en el que figuran las hermosas artistas ‘Rita’ y
‘Rosario Ortega la Farrié’, ‘Carlota Ortega’, ‘Manuela Moreno la Pirulí’,
‘Emilia’ y ‘Juana Vargas’; el bailador ‘Antonio Ramírez’ y las cantadoras de
flamenco ‘La Pampi’ y la ‘Moreno’, y los afamados tocadores de guitarra ‘Juan el de Alonso’ y ‘Baldomero
Ojeda’; las bailarinas ‘La Clavellina’, ‘Anita León’, ‘Conchita Alfaro’,
‘Luxentinita’ y ‘Luisa Real’, y las cancionistas y bailarinas ‘La Moderna
Sevillanita’ y ‘Lolita Guevara’; el cantador flamenco ‘El Niño de Lucena’; la
cancionista, muy mala, ‘Lolita Carranza’, que tiene más obesidad que arte y más
afonía que voz, y ‘La Niña de los Peines’.”.[35]
Una
semana después del famoso Concurso de Cante Jondo de Granada empiezan a
emularse este tipo de competiciones. Claro ejemplo es la que tuvo lugar el
sábado 24 de junio de 1922, dentro de los eventos organizados en la velada de
la Plaza de San Juan de la Palma, donde Currito ejerció de guitarrista. Así lo
expone el siguiente extracto de una extensísima crónica que firma el
polifacético periodista Juan Lafita Díaz ‘Jatifal’ (1889-1967) al día
siguiente:
“El primer día de velada.
Anoche, primer día oficial de la velada de San Juan, vióse ésta
animadísima.
La plaza de San Juan de la Palma estaba atestada de público. (...).
En la noche del 27, concurso de «cante jondo», en el que tomarán parte
los afamados cantadores Centeno, Niño Medina, Cojo Pomares; Niño Gloria y las
hermanas Pompi, y los no menos tocadores de guitarra Currito y el Niño Huelva.”.[36]
Antigua imagen de la Plaza de San Juan de la Palma.
Por esas fechas participa frecuentemente en las
fiestas que se dan en el Círculo Mercantil, de Sevilla, donde coincide con Pepe
Pinto, quien además de trabajar de croupier, llevaba a los artistas para las
actuaciones musicales, pasando por allí lo mejor de entonces: Tomás Pavón,
Manuel Torre, El Gloria, Manuel Vallejo, La Pompi y El Niño de Marchena entre otros.[37]
Al
cabo de unos meses, ya avanzado el estío de ese año de 1922, actuaría Currito
en su tierra acompañando a dos colosos de la época. Lo haría en un conocido
cine de verano instalado en los jardines interiores del recinto amurallado de
la antigua fortificación almohade de Jerez. Sendos anuncios al respecto se insertaron en el diario “El Guadalete” el día del evento, sábado 9 de septiembre:
“En el Real
Alcázar.-
-Cante
“jondo”.-=
La empresa
«Rosales» que tiene a su cargo el cine de El Alcázar, ha organizado para esta
noche un programa sorprendente y de gran atracción.
Alternando
con magníficas películas, habrá otro espectáculo que en Jerez cuenta con muchos
admiradores.
Actuarán dos
de los más celebrados artistas del cante flamenco: nuestro paisano Manolito
Torres, que tan bien interpreta las seguidillas, y Manuel Vallejo, rey de las
tarantas, el cante de Levante.
Acompañarán a
la guitarra a los maestros el joven tocador jerezano como el primero de
aquéllos, «Currito er de la Jeroma».
Habrá dos
secciones, comenzando la primera a las ocho y media de la noche y la segunda a
las diez y cuarto. La entrada de
preferencia valdrá una peseta y la de gradas, cuarenta céntimos.”.
Antiguo Cine de El Alcázar de Jerez,
cuya actividad duró hasta bien entrados los años
cuarenta del siglo XX.
“Espectáculos.-
Recreo El
Alcázar.
Gran
cinematógrafo.
Un colosal
programa de películas y los célebres cantaores de flamenco y
seguirillas Manuel Torres «Niño de Jerez» y el célebre cantador Manuel Vallejo,
rey de las Tarantas, acompañados a la guitarra por el célebre tocador «Niño de
la Geroma».
Dos
secciones. A las 8’30 y a las 10’15.
Precios:
Preferencia 1’00. Consumao, 1’25. General, 0’40.”.[38]
La
crónica que el mismo diario inserta al día siguiente fue favorable, anunciando
para ese día, domingo 10, una nueva actuación. Tal contaría con la
participación del gran cantaor de la tierra José Cepero que, paradójicamente es
anunciado con el remoquete con que era conocida su madre, añadiéndose
otro importante guitarrista de la tierra que compartió aquel escenario
con Currito:
En página 3 del n.º 22.288
de “El Guadalete. Periódico
de interés general”
de Jerez de La
Frontera; domingo 10 de septiembre de 1922.
El 20 de septiembre de ese año Manuel Vallejo fue contratado
por don Luis Pérez, empresario entonces del Teatro Lara de Málaga. En dicho
coliseo el cantaor sevillano se hizo acompañar en sus recitales por Currito, anunciado
como “Niño de la Jeroma”. Hicieron su presentación el jueves 5 de
octubre de 1922 y prolongaron sus actuaciones hasta el sábado 14 del mismo mes,
por las que percibían cien pesetas diarias.[39]
También
sabemos que Currito el de La Jeroma estuvo entre los invitados y asistentes al
almuerzo con que el empresario del Café Imperial de Sevilla obsequió a Pastora
Imperio, el cual tuvo lugar a finales de octubre de 1922. La prueba de ello es una fotografía donde nuestro protagonista aparece entre los convocados a
dicho agasajo.
Almuerzo en obsequio a Pastora Imperio, que aparece la
tercera, sentada, de derecha a izquierda. El primero de pie a la derecha, es
Currito de La Jeroma. También en esa misma línea hacia la izquierda aparecen
Víctor Rojas, (3º), Pepe Torre (4º) y Antonio El Mellizo (5º).
(Fotografía original del evento que fue reproducida en
la página 21 el n.º 685 la revista “La
Unión Ilustrada” de Málaga; domingo 22 de octubre de 1922).
A partir de entonces fue cuando más actuó en los cafés cantantes sevillanos, especialmente en el denominado Novedades y en las fiestas íntimas de los colmaos de la Alameda de Hércules, acompañando, aparte de los más destacados cantaores de su época, a bailaoras como Juana de la Cruz Vargas de Las Heras ‘La Macarrona’ (1870-1947) y en varias giras a Pastora Rojas Monje ‘Pastora Imperio’ (1887-1979).
El primer Concurso de Cante Jondo de
Huelva. La Vinícola.
En pleno verano de 1923, participó Currito de la Jeroma
acompañando en un concurso de cante organizado por la Hermandad de las Cadenas
de la ciudad de Huelva, que tuvo lugar en la Plaza de Toros de la Merced. Así fue anunciado por la prensa sevillana, a través del diario “El Liberal”, con dos semanas antelación:
“Huelva. (...).
-Ya está
ultimado el programa del concurso de «cante jondo» que se celebrará en esta
plaza de toros en las noches del 21 y 22 del actual.
Tomarán parte
en la fiesta, fuera de concurso, los célebres «cantaores» Chacón, Niña de los
Peines, Centeno, Caracol, Niño de Jerez. Caracolito. Vallejo, Gloria y otros.
«Tocaores»:
Habichuela, Moreno, Rofa, Montaya y Niño de la Jeroma. (.../...).
Como
se verá para dicho evento acompañaría Currito el cante de algunas figuras contratadas,
mientras que a los concursantes los secundaba un guitarrista de la tierra,
barbero de oficio, Rafael Rofa Rodríguez (1896-1982).
El tocaor onubense Rafael Rofa Rodríguez.
Este
fue el programa que publicó el diario onubense “La Provincia” del primero de los días del evento, sábado 21 de
julio de 1923:
“Concurso de
Cante Jondo.-
Programa para
las Dos Noches.
1.º Cuadro de
baile flamenco, cantando «La Pompi» y «Caracol».
2.º
Intermedio por la banda municipal.
3.º Concurso
de cante.
El día 21 se
cantarán Soleares y Siguiriyas.
El día 22,
tarantas, malagueñas y fandangos.
Acompañará a
los concursantes el afamado guitarrista Rofa.
En este
Concurso se adjudicará un premio de doscientas pesetas al aficionado que cante
mejor en cada clase de copla, a juicio del jurado.
4.º Cantarán
por orden de antigüedad los artistas contratados:
«Caracolito».
Centeno.
Vallejo.
Gloria.
Manuel
Torres.
Antonio
Chacón.
Acompañarán a
estos artistas los célebres guitarristas, «Niño de Huelva», Moreno y «Niño de la Jeroma».
5.º Visión
fantástica de una noche de Jueves Santo en Sevilla, tomando parte en este
número los cantadores, la célebre banda de cornetas del tercer regimiento de
artillería ligera, de guarnición en Sevilla y la banda municipal.
En este
espectáculo, que se ejecuta por primera vez en España, se cantan Saetas, la
banda de cornetas hace filigranas y termina con la marcha real que señala la
entrada de la Cofradía. (...).
«La Perla».
La Comisión
organizadora de este concurso ha contratado para sustituir a la «Niña de los
Peines» a la célebre y genial artista Antonia Morales (a) «La perla de Triana»,
que cantará soleares y saetas.”.[41]
La
crónica del segundo de los días fue reseñada por el periodista de la Palma del
Condado, José Antonio Jiménez Macías ‘Pepe de la Rábida’ (1879-1944),
corresponsal del diario sevillano “El Liberal”,
del siguiente modo:
En página 5 del n.º 8.311 del diario “El Liberal” de Sevilla;
Domingo 22 de julio de 1923.
Y
aquí una reflexión: si Manolo de Huelva solía acompañar a Manuel Torre, es muy
posible que Currito acompañara a don Antonio Chacón.
Mucho
más descriptiva y extensa fue la crónica que de las dos noches hizo la prensa
local por medio de “La Provincia”, el
día después de la celebración del flamenco evento, y de la cual rescatamos los
siguientes párrafos:
“Durante las dos
pasadas noches, hemos tenido ocasión de poder apreciar el arte flamenco en
todas las manifestaciones, reviviendo sus esplendores pasados.
Hemos podido
escuchar a cantadores de la escuela neta puramente clásica como Chacón, el Niño
de Jerez y el Gloria; al incomparable Centeno que representa la modalidad nueva
del arte orientándolo por sendas desconocidas; a Caracolillo que viene a ser el
enlace de lo antiguo con lo moderno y a una serie de aficionados conocedores
casi todos, del difícil arte del jipío.
La belleza de
esta original fiesta, ha sido aumentada por el concurso de bailaores y
guitarristas, cada cual notabilísimo en su género, como la Pompi y Ortega y el
Niño de Huelva, cooperando a la mayor brillantez del concurso, la banda de
cornetas del regimiento de Artillería de Sevilla cuyo triunfo era de esperar
dada la maestría del sargento y los cornetas a sus órdenes. (...).
La Perla de
Triana es otra chica cañí de la más pura cepa, que canta con arreglo a los
cánones de la tradición de su barrio.
Única imagen conocida del Concurso de Cante Jondo de
Huelva
(Fotografía realizada por Calle, para la revista “Mundo Gráfico” de Madrid; miércoles 8 de
agosto de 1923).
El domingo
cantaron a más del primero el Serrano y otro aficionado forastero.
A todos se
les aplaudió constantemente en las distintas «siguiryas» y «soleares» que
cantaron y en las que se distinguieron notablemente Rengel y el Cuchillero.
A
continuación, desfilaron los profesionales cantando la «Perla de Triana»,
«Gloria», «Caracolito», Centeno «el Niño de Jerez», y el pontífice del cante
«jondo» don Antonio Chacón.
Todos
cantaron muy bien, viéndose en ellos grandes deseos de agradar al público
gustando mucho Centeno por su agradable y sencillo estilo.
Fue
ovacionadísimo este cantaor en varios fandanguillos alosneros y el inimitable
Chacón, que recordó sus buenos tiempos cantando como él solo sabe hacerlo.
El auditorio
los aplaudió con verdadero entusiasmo haciéndoseles repetir las coplas hasta la
saciedad.
La banda de
cornetas tocó en honor de los cantaores varias veces.
También
consiguieron muchos aplausos los guitarristas «Niño de Huelva», Rofa, Moreno y
«Chico de la Jeroma» que acompañaron con sumo gusto y arte a los «cantaores».
(...)”.[42]
Reunión flamenca en torno al guitarrista Paco de
Paradas.
El primero a la derecha de la imagen que aparece de pie es
Currito de La Jeroma y a su lado La Perla de Triana. Ambos participaron en la
Plaza de Toros de Huelva de 1923.
El
mencionado Jiménez Macías insistía en el buen papel de los tocaores al hablar
de la segunda sesión del concurso:
“...Los notables
cantaores fueron ovacionadísimos en justicia, pues estuvieron sencillamente admirables.
Les
acompañaron en la guitarra maravillosamente, Niño de Huelva, Antonio Moreno,
Niño de la Jeroma y Rofa. Estos cuatro grandes guitarristas han compartido muy
justamente los aplausos ambas noches con los célebres maestros del «cante
jondo». (...). Niño de Huelva tocó, para sus paisanos, algunas «cosillas» en la
guitarra, y casi «na». ¡Lo que ha salido de Huelva! (...).”.[43]
Ambos
días, tras las secciones del concurso propiamente dicho, se cantaron saetas por
los profesionales, ambientando el momento la música procesional que desgranaron
tanto la banda municipal dirigida por el Maestro Castillo como la de cornetas
del tercio de artillería de Sevilla. Entre los aficionados en liza se constataron
los siguientes: Diego Díaz ‘Petaca’, con serias opciones de premio que no
culminaron al cantar únicamente el primer día; Antonio Rengel, premiado en
soleares, José Sánchez ‘El Cuchillero de Huelva’ en seguiriyas, Fernando
Santiago Romero en tarantas; Diego Cárdenas Rojas ‘Rojitas’ de Isla Cristina en
malagueñas, y José Ponce Sánchez ‘El Serrano’ en fandangos. La
prensa madrileña en varios periódicos también se hizo eco del evento repitiendo
la misma crónica de la que destacamos los siguientes párrafos:
“Concurso de
Cante Jondo
Huelva 23
(4,20 t.).- Con éxito extraordinario se ha celebrado el concurso de “cante
jondo”. Asistieron la banda de trompetas de Artillería de Sevilla y la banda
municipal.
Tomaron parte
en el concurso los “cantaores” locales “Niño de Rengel”, Rojas, el
“Cuchillero”, el “Petaca”, el “Serranito” y otros, todos los cuales fueron muy
aplaudidos.
Después
cantaron “Caracolito”, Centeno, el “Gloria”, “Niño de Jerez”, Antonio Chacón y
“Perla de Triana” seguidillas, soleares, polos, cañas, serranas, malagueñas y
fandanguillos.
Fueron todos
ovacionados, pero sobresalieron los dos primores, y el último obtuvo un éxito
extraordinario.
Al terminar
se cantaron saetas por los cantadores profesionales. (...).
La cantidad
consignada para premios ha sido repartida entre los cantadores locales y de la provincia
y los guitarristas “Hijo de la Jeroma”, “Rafa” (sic), Moreno y “Niño de
Huelva”. Este, a requerimiento del público, tocó varias composiciones y fué
ovacionado. (Febus.)”.[44]
Para
mayor información sobre este importante evento remitimos a los completos
artículos de nuestro buen amigo Miguel Ángel Fernández Borrero gran erudito de
la historia flamenca de Huelva.[45]
Más
de un año después, finales de septiembre de 1924, encontramos a Currito entre
la magnífica nómina de artistas, sin duda lo más granado del flamenco de la
época, que habitualmente trabajaban en el restaurante ‘La Vinícola’ de la Plaza
del Duque de Sevilla. Para su reapertura su dueño, Marcos Borbolla, fomentó la organización
de fiestas como un atractivo más a los banquetes que allí se ofrecían, tras
haber acometido una reforma integral del popular establecimiento. Así recogía la
oferta el diario “El Liberal”:
“Los grandes
establecimientos.-
El restaurant
La Vinícola.- (...).
Los
“ases" del cante flamenco y de la guitarra, triunfan en “La Vinícola”. (...).
Y de
alicientes, pura qué hablar. Sabido es que la «capilla sixtina» del cante
flamenco es La Vinícola.
Si fuera de
este establecimiento se organiza una fiesta flamenca, hay que ir á La Vinícola
por el cantador y el tocador.
Al artista
flamenco no hay que oírlo en público, que es donde mejor canta; hay que oírlo
en esas reuniones donde Don Fulano paga bien y ordena el estilo, y si ese
señorito es pan de rosa, entonces el delirio.
Para esas
juerguecitas están inscriptos en la lista de La Vinícola los artistas
siguientes:
Cantadoras:
La Niña de los Peines, la Moreno y las hermanas Pompi.
Cantadores:
Tomás, Arturo, Colorao, Niño Medina, los hermanos Manuel y Pepe Torres,
Centeno, Vallejo, Gloria, Cojo Pomare, Niño Marchena, Cayetano, Villalba,
Pareja, Mazaco, Cagancho, Salvador, Caracol, padre é hijo; Posadero, Pena, Niño
Lucena, Antúnez, Cañete y Tiznao.
Tocadores de
guitarra: Habichuela, Niño de Huelva, Currito el de la Jeroma, Antonio y Manuel
Moreno, Flores, Baldomero, Bernardo, Javier Molina, Juan Alonso, Pepillo el de
Jerez, Titi de Marchena, Niño de Ricardo y Miguel de Marchena.
Bailadores:
Paco Senra, Antonio Ramírez y Frasquillo.
La Vinícola,
para servir al momento los pedidos, tanto de día como de noche, ha adquirido un
magnífico taxis.”.[46]
Imagen retrospectiva de la Plaza del Duque de Sevilla.
En un mismo edificio La Vinícula (mitad izquierda) y Teatro Duque haciendo
esquina con la calle Trajano.
(Archivo Julio Domínguez Arjona).
La
galería reseñada ofrecía un contingente de máximas figuras que incluía ‘las
casas’ de ‘Los Pavones’ y ‘Los Torres’ al completo y contenía altamente
representadas las escuelas sevillanas y jerezanas de las tres disciplinas
flamencas, añadiéndose personalidades tan interesantes como Joaquín Rodríguez
Vargas ‘Cagancho’ (1871-1938), el sanluqueño Diego Antúnez Nicolás (1865-1941),
Salvador García Cordón ‘Salvaoriyo Hijo’ (1872-1955), Villalva de Huelva, Cayetano
Muriel Expósito ‘Niño de Cabra’ (1870-1947), José Arroyo Lucena ‘Niño de
Lucena’, el coriano Francisco González San Román ‘Mazaco’ (1898-1947), José
Pérez ‘El Tiznao’ o Manuel Domínguez ‘El Pena de Sevilla’ en el cante; o el
gaditano Juan Ganduya Padilla ‘Habichuela’ (1871-1925), el sevillano José
Flores –muy requerido en recitales radiofónicos de la época-, o los marcheneros
Miguel Jiménez Torres (1897-ca.1954) y Manuel Fernández Fernández ‘El Titi’
(1891-1953) en el toque. En cuanto al cantaor Cañete nos inclinamos a pensar
que pudiera tratarse del gaditano Rafael Cañete, más que el malagueño Rafael
Cruces ‘Niño de Cañete’.
Del
colosal listado observamos que, entre los tocaores, aparece Pepillo El
Jerezano, que como vimos participó en el homenaje a Antonio El Portugués,
celebrado cinco años antes. También se reseña a Juan el de Alonso, padre de
Currito, quien debió coincidir con su hijo en muchas de
las fiestas que se organizaban en La Vinícola.
Algunos de los grandes artistas
flamencos asiduos de ‘La Vinícola’:
De izquierda a derecha
Manolo de Huelva, José El Colorao, La Pompi, Manuel Torre y Manolo Moreno.
De
estas fiestas salían las contrataciones para actuar en el aledaño Teatro del
Duque y para el caso de Currito hemos localizado sendas actuaciones, de final
de ese año de 1924 e inicios de 1925, acompañando en una el cante de José
Cepero, y en la otra el de Manuel Centeno y Manuel Vallejo, según sus
respectivos anuncios:
En página 5 del n.º 8.755 y en página 5 del n.º 8.798
del diario “El Liberal” de Sevilla;
Ediciones del martes 9 de diciembre de 1924 y jueves 22
de enero de 1925.
No
obstante, la segunda de estas proyectadas comparecencias, en la que al parecer
iba a cantar también El Colorao de La Macarena, se vio truncada por la
imposibilidad de asistencia de ambos artistas. El mismo diario dos días después
deja entrever la indisposición de Currito tal vez motivada por la dolencia
que padecía:
“Duque.-
La función á
beneficio de la Asociación de la Prensa. (...).
El programa
fué cumplido en todas sus partes, poniendo á contribución los artistas del
popular coliseo sus aptitudes para obtener la mayor brillantez del espectáculo.
Lástima que indisposiciones inesperadas y repentinas obligaron á pequeñas
variantes en la parte de la segunda sección, correspondiente al cante flamenco,
por la ausencia del cantador apodado «El Colorado» y la del guitarrista «Curro
el de la Jeroma»; pero como los chicos de la Prensa saben darse mañas para
estas cosas, bien pronto se subsanaron estas omisiones, con indudable ventaja
para el público, pues el gran Centeno y el maravilloso Vallejo, acompañados por
el formidable guitarrista Manuel Moreno, que galantemente se ofreció á los
«chicos», hicieron verdaderas proezas en cante y toque, deleitando á la
concurrencia, que no cesaba de ovacionar caracoles, tientos, fandanguillos,
tarantas, malagueñas y, por último, las insuperables saetas, en las que los ya
citados artistas hicieron verdaderos prodigios. (...).
Unos
meses después, ya en primavera, mediando abril de 1925, encontramos a Currito
tocando la guitarra en una fiesta flamenca en la vecina localidad de Dos
Hermanas, concretamente en la Huerta Nuestra Señora de las Mercedes y en
presencia del general José Sanjurjo Sacanell (1872-1936) al que se agasajaba.
El selecto elenco que actuó fue dirigido por el cantaor sanluqueño Diego
Antúnez. Así lo contó la prensa al día siguiente:
En página 4 del n.º 8.878 del diario “El
Liberal” de Sevilla;
Miércoles 15 de abril
de 1925.
Destaca
aquí la figura de la jerezana María La Moreno (1899-1955), extraordinaria
cantaora que revolucionó sin duda el palo de las bulerías por soleá o bulerías
para escuchar. De otro lado Reyes García formó parte al día siguiente, junto a
otras cinco bailaoras, del “cuadro sevillano” que participó en “La Fiesta
del Cante y el Baile Andaluz”, en la que también participó Currito.
Gran fiesta flamenca del Hotel Alfonso
XIII. Actuaciones en Sevilla.
Efectivamente,
la noche del miércoles 15, y también la del viernes 17 de abril de 1925, el gitano formó parte
de un gran elenco que actuaría en la solemne fiesta andaluza que llevaba
aparejada un concurso de cante, la cual fue organizada por la asociación “Fomento del Arte Popular Andaluz” y tuvo
lugar en el patio del Gran Hotel Alfonso XIII de Sevilla en vísperas de la
feria. De los preparativos de tal acontecimiento se había hecho eco la prensa
cordobesa que lo anunció con casi diez días de antelación y algunas imprecisiones respecto
a los elementos que habrían de darle color:
“La primavera en
Sevilla.
Fiesta del
baile y cante andaluz. (...).
Está
organizada por prestigiosos elementos artísticos e intelectuales de la capital
andaluza, con propósito de dignificar el cante y baile flamenco y estimular el
cultivo de sus diversas modalidades mediante la concesión de importantes
premios en metálico.
Comenzará el
espectáculo con una conferencia del grandilocuente orador sevillano Excmo.
señor don Manuel Blasco Garzón acerca del tema «Divagaciones sobre los cantes
andaluces», siguiendo la ejecución de los distintos cantes y bailes andaluces
por profesionales y aficionados.
De entre los
primeros se cuenta con los más afamados «cantaores», «bailaores» y «tocaores»,
entre otros Luisa Requejo, Niño de Marchena, Fernando el herrero, Currito el
de la Jeroma; El niño de Ricardo, Baldomero Ojeda, Las Macarronas, Eduardo
Heredia y otros muchos.
Entre los
aficionados que se presenten al concurso se distribuirán por el jurado, del
cual forma parte don Antonio Chacón, varios premios de quinientas y doscientas
cincuenta pesetas.
Y para
completar los ya numerosos atractivos de la fiesta, se ha constituido un jurado
de honor formado por seis bellísimas señoritas de la aristocracia de Sevilla
que con su presencia darán la máxima brillantez a tan simpática fiesta. (...).”.[48]
Hotel
Alfonso XIII de Sevilla en 1925.
A
la fiesta asistió numeroso publico y, entre otras personalidades, los infantes
Don Carlos y Doña Luisa, sus hijas y sus sobrinas las hijas del duque de
Calabria.
Ambos
días actuó el grupo de bailes
andaluces y sevillanas formado por la ya citada Reyes García, Consuelo
Paredes, Manolita Ruiz, Rosario Araujo, Conchita Paredes e Isabelita Moreno,
aunque igualmente se citan en la
segunda noche a Manuela Álvarez, Rosario Moreno, Isabel Araujo y La Iberia.
Participó igualmente una zambra trianera formada por ocho gitanillos.
Fotografía del patio
del Hotel Alfonso XIII de Sevilla donde se celebró la “Fiesta del Cante y el Baile Andaluz” el
miércoles 15 de abril de 1925.
Cuadro de seis bailaoras en las sevillanas.
(Fotografía del diario “La Unión” de Sevilla, 16 de abril de 1925).
Entre
los concursantes aficionados señalar a José Martínez ‘Vaquerito de San Bernardo’,
que cantó por malagueñas y soleares; Manuel Macías, por seguiriyas; Manuel
Heredia ‘El Cuqui de Triana’, por bulerías; Miguel Moreno, por malagueñas,
Concepción Aguilar y Antonio Martín, por fandangos; y los premiados: Juan
Ponce, de Hinojosa del Duque, por malagueñas; José Manuel García Fernández ‘Niño
de Sanlúcar’, por malagueñas y seguiriyas, y Juan García Campos, de
Villamanrique de la Condesa, por seguiriyas, soleares y martinetes.
De
profesionales actuaron Luisa Requejo, que cantó por soleares, malagueñas, seguiriyas y granaínas, El Niño de Marchena por granaínas y fandangos, Fernando el Herrero
por polos, serranas y malagueñas, y Chacón por granaínas, caracoles, malagueñas
y tarantas (conceptuadas hoy como cartageneras propias).
Cuatro
fueron los guitarristas: Baldomero Ojeda, Niño Ricardo, Currito el de La Jeroma
y Ramón Montoya.
Fotografía del patio
del Hotel Alfonso XIII de Sevilla donde se celebró la “Fiesta del Cante y el Baile Andaluz” el
viernes 17 de abril de 1925.
De izquierda a derecha: Maria Luisa Vargas de La Hera –hija de
María La
Macarrona-,
Rosario –cantaora-, posiblemente Currito el de La Jeroma de pie, el Niño Ricardo, Juana La Macarrona
bailando, Baldomero Ojeda, posiblemente María La Macarrona y Celia Gou, bailaora.
Así recogió Agustín López Macías ‘Galerín’ en “El Liberal” la participación de Currito acompañando al Niño de
Marchena y a Luisa Requejo el segundo día de este sonado evento:“El Niño de Marchena y
Currito el de la Jeroma
están en el escenario. Ha estallado la ovación, y en seguida un silencio como
de querer escuchar.
Las medias granadinas le han salido admirables, y al
repetir lo hace con fandangos. ¡Chist!
Dime qué tienes serrana,
que estás tan pálida y triste,
siendo tú la rosa grana
que en mis jardines naciste
y yo te corté en la rama.
Y en tono mucho más alto, llevando la voz a todas
partes, con un poderío enorme y un gusto exquisito, Marchena se arrancó de
nuevo:
Vivir sin ti no es vivir;
vivir contigo tampoco.
¿Me quieres tú á mí decí
si no es pa volverse loco
esto que me pasa a mí?.
El público rompió con una ovación clamorosa.
–Y eso que estoy ronco –nos decía el excelente
artista-. (...).
Descanso. – Ensayos.
La Segunda Parte.
Fandanguillos, por Antonio Martín. Muy requetebién.
La Requejo aparece en el escenario, y con gran estilo
canta malagueñas. La aplauden mucho y canta seguidillas, y ante los aplausos de
la concurrencia terminó cantando medias granadinas. Currito el de la Jeroma y la cantaora han
agradado mucho. (...).”.[49]
El Niño de Marchena y
Luisa Requejo, acompañados por Currito de la Jeroma
en la fiesta del Hotel
Alfonso XIII de Sevilla.
A Juan el de Alonso se le localiza en la tercera semana de mayo de 1925,
por el tiempo de la tradicional Fiesta de La Cruz, al participar en la fiesta
flamenca que se organizó en la casa de don Hilario Gutiérrez, según señala
diario “El Liberal”:
“...En un rincón
templaba la guitarra Juan el del Alonso, Ramírez, el que mejor baila flamenco,
rondaba el hueso del jamón, hasta que cargó con él.
La fiesta se
calentó cuando se arrancaron bailando jaleo, bulerías y sevillanas Juana la
Macarrona, que cada día está más joven; María la Roteña, Carmelita Borbolla,
María la Sevillanita, Celia Gou y Angelita Fe.
También se
presentó en la fiesta el maestro Real, sin sus niñas. Solito y solo.
Cuando el día
empujaba á la noche, Hilario nos empujó á todos, y la cruz del querer quedó
clausurada hasta el año que viene.”.[50]
Currito, por su parte, participó en otra fiesta flamenca que se
organizó en Sevilla en honor del filósofo libanés e ilustre profesor de
Academia de Damasco Habib Stéfano (1888-1946), la cual tuvo lugar el 27 de
junio de 1925, según recogió el diario local “El Correo de Andalucía” dos
días después:
“Anteanoche y terminada su hermosa disertación en
el Ateneo sobre la Poesía de la Vida, un grupo de ateneístas distinguidos le
obsequió con una típica fiesta andaluza...
En la fiesta tomaron parte los cantadores flamencos
Niño de Jerez, su sobrino Manolo y El Colorao, acompañándolos a la guitarra
Currito el de la Jeroma”.[51]
Meses
después acompañará Currito a Manuel Vallejo, que había regresado a Sevilla tras
su exitosa campaña madrileña que culminó el 24 de agosto erigiéndose vencedor en
el Concurso de Cante celebrado en el Teatro Pavón y conquistado la preciada ‘Copa
Pavón’. Así pues, es contratado para actuar en principio una única noche en el
Teatro del Duque el miércoles 28 de octubre de 1925, con dos pases:
En página 3 del n.º 9.073 del diario “El Liberal” de Sevilla;
Miércoles 28 de octubre de 1925.
Con
un éxito rotundo saldó esta actuación Manuel Vallejo, según atestigua el
periodista ‘Don Félix’ al final de su crónica teatral en el diario “El Liberal” al día siguiente:
“Los Teatros.-
(.../...).
Duque. (...).
Anoche, en
segunda y tercera sección, y con dos entradones, hizo su presentación el famoso
cantador del género andaluz Manuel Vallejo, acompañado á la guitarra por
Currito el de la Jeroma, cantando granadinas, fandanguillos, seguidillas
gitanas y otros cantes flamencos, entre clamorosas ovaciones.
Vallejo,
cuyas facultades para el difícil genero que cultiva son muy apreciadas por
todos los aficionados, confirmó anoche el resonante éxito alcanzado
recientemente en Madrid, y no sería extraño que ante los concurrentes al teatro
del Duque volviera en noches próximas á hacer gala de su depurado estilo y buen
gusto.
Esta
actuación de Vallejo supo a poco y en vista del éxito alcanzado hubieron de
prorrogarse sus recitales tres días más: el viernes 30 y sábado 31 de octubre, y domingo 1 de
noviembre:
En página 3 y en la 2 de los ns.º 9.075 y 9.076 del
diario “El Liberal” de Sevilla;
Ediciones del viernes 30 y sábado 31 de octubre de
1925.
Casi
cuatro meses después, en marzo de 1926, aparece Currito actuando junto a Pepe
Torres para acompañar la presentación de la jovencísima bailaora Aurorita
Imperio, discípula de Juana La Macarrona. Estas actuaciones flamencas se
enmarcaban como contrapunto al espectáculo que lideraba la bailarina y cupletista extremeña, antigua
cantaora, María Blanca Jiménez Martín ‘La Sultanita’ (1897-1986), madre de
Aurorita y mujer del famoso empresario artístico Carlos Hernández Delgado
‘Vedrines’ (1883-1953):
“Salón
Variedades.-
La Sultanita
es actualmente la estrella de este importante Music-Hall, considerado hoy la
catedral de las varietés en Sevilla.
La Sultanita
que hace dos temporadas figuró como fin de fiestas en nuestro teatro Cervantes,
ha logrado ahora un triunfo tan rotundo y merecido, que bien puede decirse que
es de los más clamorosos que ha conseguido en Variedades artista alguna. (...).
También es
ovacionadísima todas las noches la joven y monísima bailarina Aurorita Imperio
bailarina á orquesta y de flamenco, acompañada por el buen cantador Pepe Torres
y el mago de la guitarra Currito el de la Jeroma.-
Aurorita
Imperio de continuar bailando flamenco con el arte que lo hace, muy pronto le
dará lecciones á su maestra, la gran Macarrona.
Sultanita y
Aurorita Imperio á causa de cumplir un compromiso contraído anteriormente,
harán sus despedidas el martes día 23. (...).”.[53]
La Sultanita y su hija Aurorita Imperio.
(Fotografías de “La
Voz de Aragón”; 10 de diciembre de 1930).
Por
el tiempo que nos ocupa había nacido su segundo hijo, Manuel y así se expuso en el
Padrón de Habitantes de ese año:
Nota del nacimiento de Manuel Leiton Mejías, hijo de
Currito en el
Padrón de Habitantes de Sevilla del año 1926.
En
el otoño de ese año, finales de octubre de 1926, aparece acompañando a dos
grandes del cante Paco Mazaco y Rafael Ramos Antúnez ‘El Gloria’ (1893-1954) en una
fiesta organizada por el Doctor Centeno, fundador del Hogar de la Raza, en homenaje a algunos ilustres
prohombres argentinos:
“Vida de
sociedad.— (...).
Convocados
por al señor Centeno los distinguidos representantes del continente colombino
en el estudio del notable escritor y doctor eminente señor Sánchez Cid, cuyas
obras fueron contempladas y muy elogiadas en justicia por sus visitantes, los
famosos ases del cante jondo, Masaco y el Niño Gloria pusieron cátedra de
estilo, rivalizando en fandanguillos y soleares, siguirillas y tarantas, que
iba subrayando en su magnífica sonanta «Currito el de la Jeroma», los
extranjeros mostrábanse encantados de aquel alarde de música popular andaluza y
felicitaron al despedirse a los organizadores de la íntima fiesta, altamente
simpática, quienes invitaron a todos espléndidamente a una exquisita cena
rociada de vinos de la tierra. (...).”.[54]
Nuevamente acompañaría el cante de Manuel Vallejo los
días jueves 5 y viernes 6 de agosto de 1926 en el Teatro Español de Sevilla,
regentado por su nuevo empresario Olivares, dentro de un “Grandioso Espectáculo”,
en donde también actuaron los cantaores Antonio Rivero Basuzaga ‘Niño de Alcalá’ y José El
Tiznao, junto al elenco de
baile de Frasquillo, integrado por Francisca González y Juan Moyano ‘El Tumba’ además del
tocaor sanluqueño Antonio Delgado. Así se les anunció en el cartel:
“3.º Presentación del único cantaor de flamenco que
ha conquistado los mayores triunfos: Manuel Vallejo; Rey del Cante Jondo.
Ganador de la Copa Pavón
en el concurso celebrado en Madrid. Acompañado del eminente tocador de guitarra
Currito el de La Jeroma”.[55]
A
inicios de año siguiente, y en concreto para el domingo 30 de enero de 1927,
acompañaría Currito a dos cantaores poco conocidos en la sede de La Sociedad
Benavente establecida en el pasaje de Andreu, n.º 2, en el típico barrio de
Santa Cruz, donde solían darse bailes de sociedad y veladas teatrales o
musicales:
En página 2 del n.º 9.791 del diario “El Liberal” de Sevilla;
viernes 28 de enero de 1927.
Y
dos meses después, el sábado 26 de marzo participaría Currito en el beneficio
organizado al tocaor José Flores nuevamente en el amplio salón de la Sociedad
Benavente. En dicha velada se habían convocado elementos importantes como los
bailaores Francisco León ‘Frasquillo’ (1898-1940) y su esposa Francisca
González Martínez ‘La Quica’ (1905-1967), destacando entre los cantaores a
Miguel Moreno ‘Niño de Los Talleres’, Manuel El Gordete que en calidad de
aficionado cantó en el concurso de la “Fiesta
del Baile y Cante Andaluz” del patio del Hotel Alfonso XIII mediando abril
de 1925, José Arroyo ‘Niño de Lucena’, Rafael Santiago ‘Niño de Linares’, Antonio
Fuentes ‘El Carrero’, Paco Mazaco, José El Colorao, Eduardo Lorente ‘Cojo de La
Macarena’ y el cantaor y humorista pacense José Raimundo Azuaga Morcillo ‘Pepe El
Limpio’ (1894-1945); y de tocaores nuevamente aparece Pepillo de Jerez. Muchos
de ellos volverían a convocarse en el homenaje al propio Currito
tiempo después.
En página 3 del n.º 9.846 del diario “El Liberal” de Sevilla;
Viernes 25 de marzo de 1927.
Por
su parte el padre de Currito trabajaba en el café cantante ‘El Tronío’, antiguo
‘Café Madrid’ ubicado en la confluencia de calle Sierpes n.º 35 con Rivero, n.º
12 y callejón del Imperial. Así lo recoge un cartel correspondiente al domingo 8
de mayo de 1927; función de despedía Antonio Rengel quien fue acompañado por
Antonio Moreno:
“Por la Noche –
Programa –
Sinfonía por
la orquesta Lara.
Cuadro
Flamenco en el que figuran las clásicas «bailaoras» La Roteña, La Sevillana, La
Angelita, La Romerito, La Coriana, Manuela La Piruli, Carmelita de Málaga.
Cantadora:
Amparo La Trianera.
Tocadores:
Juan Alonso, Baldomero Ojeda y el director del cuadro Antonio Moreno.-
Clásico
Cuadro Andaluz compuesto de Cinco Señoritas y Un Caballero.”.
Interior del Café El Tronío. Tablado y patio.
(Fotografía diario “ABC” de Sevilla; 31 de diciembre de 1929).
A
inicios del año siguiente, en concreto en la noche del sábado 18 de febrero de
1928, aparece Currito acompañando a grandes cantaores en un famoso y conocido local sito en la Plaza de La Europa con calle Conde de
Torrejón, antesala de La Alameda de Hércules: “·‘Un vino de
honor’.-
En el
restaturant Las Siete Puertas tuvo lugar la noche de ayer un vino de honor para
obsequiar al inspector provincial de Sanidad, doctor Ferrán, y á los doctores
Ruiz de la Riva y Mota Ferrero.
Le ofrecían
el acto los alumnos que han concurrido al curso de venereología últimamente
celebrado en el Dispensario número 2, de Triana, donde los citados doctores
están llevando á cabo una plausible labor de higiene social. (...).
El cursillo
ha sido de gran utilidad para los futuros médicos.
Terminada la
que pudiéramos llamar parte técnica, y tratándose de gente joven, la reunión
derivó por el lado alegre, y amenizaron el agradable rato los cantaores Niño de
Gloria, Niño Medina y Arzuaga, y los tocadores Manolo Moreno y Currito Jeroma,
terminando la reunión con unas «saetas» admirablemente cantadas por El Gloria. Y á las doce
cada mochuelo se marchó á su olivo.”.[56]
Las Siete Puertas.
Dos
meses después, a finales de abril de 1928, los mismos protagonistas de la
fiesta anterior, junto a Manuel Torre se encuentran en plena Feria de
Sevilla, actuando en la caseta de don Celestino Fernández:
“La Feria de
Abril.-
Quinto día.
(.../...).
En la Caseta
Número 25.
No tiene
pérdida: la más concurrida, donde se prodiga la manzanilla y se solemniza
nuestra feria con más rumbo. Los señores don Celestino Fernández y Valois se
han empeñado en que allí no se quepa á todas las horas, y lo consiguen
plenamente.
Ayer se cerró
á las cinco de la mañana, y aquello era como un himno á nuestra tierra,
admiración del mundo en cantaores de fama y maestros de la guitarra como
Moreno, Currillo el de la Jeroma, El Limpio, Torres y Niño Gloria. (...).”.[57]
No
obstante por ese año su madre, La Jeroma, aún en activo, solía tener
actuaciones en los elencos flamencos de renombre de Sevilla. Así se sabe que
por este año de 1928 llegó a actuar en el Kursaal Internacional de la calle de
Las Sierpes, según recuerda el gran guitarrista Esteban de Sanlúcar:
“Cuando cumplía
dieciséis años, pasé al cuadro flamenco del Kursaal, junto a Javier Molina.
Allí señores, Juana la Macarrona. La Malena Antonia la Gamba, Las Pompis, La
Rubia, La Jeroma. (...).”.[58]
Últimos años del artista. Beneficio a su
viuda e hijos en Sevilla.
Como noticia inédita y hasta ahora que sepamos no referenciada en trabajo alguno daremos por vez primera el nombre de la mujer y los hijos de nuestro biografiado, datos que debemos al buen amigo José Luis Tirado Fernández.
Así estamos en disposición de afirmar que Currito de La Jeroma se había casado con Manuela Mejías Silva, natural de San Fernando, nacida el 12 de mayo de 1897, con la que tuvo cuatro hijos varones: Francisco, nacido el 2 de julio de 1924; Manuel, el 11 de julio de 1926; Juan, el 18 de mayo de 1927 y José, el 14 de febrero de 1931 y que por tanto no conoció a su padre, pues vino al mundo algo más de cinco meses después de fallecer éste.
Ya habíamos adelantado que Currito sufría desde hacía mucho tiempo una dolencia que
poco a poco iba minando su salud y que le impedía ejercer su trabajo
adecuadamente y llegado el verano de 1928 tuvo una seria recaída. Es por este
motivo por el que sus compañeros de oficio, que de todos había ganado sus
simpatías, organizaron una función benéfica que paliase de algún modo el estado
cada vez más lamentable en que se encontraba él y su familia. A inicios de
agosto de 1928 el diario “El Liberal”, no exento de crudeza, lo explicó del siguiente modo:
En página 4 del n.º 10.241 del diario “El Liberal” de Sevilla; martes 7 de
agosto de 1928.
También
“El Noticiero Sevillano” del día
siguiente exponía la triste situación del artista junto al
programa y la nómina de magníficos artistas flamencos entre profesionales y
aficionados que participarían en su beneficio como singular reclamo que elevara
la recaudación destinada a tan noble fin:
“-‘En favor de
un artista enfermo’.-
‘Un festival
a beneficio de Currito el de la Jeroma’
“Currito el
de la Jeroma”, el famoso tocador de guitarra, se halla gravemente enfermo desde
hace bastante tiempo. Currito goza de grandes simpatías entre sus amigos y
compañeros los artistas flamencos, y éstos, con el mayor desinterés, han
organizado un festival para llevar unas pesetas al infeliz artista, que tiene
que atender a su curación, y, al mismo tiempo, mantener a su mujer y tres
hijos. El noble fin que guía a los organizadores de este espectáculo merece el
apoyo entusiasta de todos.
Además, aparte
la finalidad caritativa, el festival es magnífico. El programa resulta
sencillamente insuperable.
No dudamos de
que el público, mañana, jueves, acudirá a las nueve de la noche al Cine de
Triana, calle Procurador, 29. La noble finalidad que se persigue y la calidad
de los artistas que toman parte en el espectáculo, nos permiten augurar un
éxito brillantísimo en lo que a la taquilla se refiere.
He aquí el
programa:
Primera
parte.- Gran cuadro flamenco, en el que toman parte las clásicas bailadoras
Josefa Loreto, hermanas Piruli, Pepa Molina, Carmelita Borbolla, La Malena y la
Macarrona; cantadoras: hermanas Pompi y La Moreno. Tocadores de guitarra:
Baldomero Ojeda, Manuel Moreno, José Rodríguez, Miguel Marchena, Antonio el de
Sanlúcar, Alfonso Alfaro, Aurelio Gómez y Niño de Ricardo.
Segunda
parte.- Presentación de los afamados cantadores de flamenco Niño Linares,
Fernando de Linares, Miguel el de los Talleres, Cojo de la Macarena, Fernando
el Herrero, Juan Luque, Manuel El Pena, José Torres Pinto, Paco Mazaco, Niño
Gloria, Niño de Caracol, Manuel Centeno y Mantel Torres “Niño de Jerez”.”.[59]
Así
pues, lo mejor del profesionalismo residente en Sevilla se dio cita en tan
importante beneficio. Lamentablemente la prensa no hizo seguimiento alguno de
este evento y lo único que dejó por toda crónica fue la siguiente instantánea
del abulense Juan José Serrano Gómez (1888-1969) aparecida en portada de “El Noticiero Sevillano” al día
siguiente:
En portada del n.º 12.353 del diario “El Noticiero Sevillano. Edición de la mañana”
de Sevilla;
Sábado 11 de agosto de 1928.
A
pesar de su enfermedad y de las limitaciones derivadas de la misma, el arte de
Currito seguía siendo requerido. Así se sabe que participó en Sevilla en la
fiesta del bautizo de un hijo del diestro sevillano Manuel Jiménez Montero
‘Chicuelo’ (1902-1967), primogénito de su matrimonio con la bailaora-cupletista Dolores
Castro Ruiz ‘Dora La Cordobesita’ (1902-1965). El acontecimiento tuvo lugar el
miércoles 31 de octubre de 1928 y los flamencos fueron seleccionados nuevamente
por el polifacético Diego Antúnez según narró el día después la prensa cordobesa a través del diario “La Voz”: “De Sevilla.
Bautizo del
hijo de Chicuelo.
Anoche se
celebró en la iglesia parroquial de San Lorenzo, ante la imagen de Jesús del
Gran Poder, el bautizo de un hijo del famoso matador de toros Manuel Jiménez
(Chicuelo), primer fruto de su matrimonio con la que fué artista predilecta del
público cuando se llamaba Dora la Cordobesita.
La ceremonia
revistió singular brillantez, como correspondía a un bautizo de verdadero
rumbo.
Apadrinaron
al nene don Luis Fernández Clérigo exjuez del distrito de San Vicente, de
Sevilla, y doña Josefa Jiménez, hermana del gran torero.
Terminada la
ceremonia, pasaron los invitados al Pasaje de Oriente, donde fueron obsequiados
con una espléndida comida.
Después se
celebró una fiesta «por todo lo alto», en la que tomaron parte los «cantaores»
Pepillo Pinto, Francisco Mazaco, Tomás Pavón, Manuel Torres, José Azuaga y los
«tocaores» Carlitos el de la Jeroma y Miguel Membrives, figurando como director
del «elenco» el famoso Diego Antúnez.
También
contribuyeron a animar la fiesta los cuadros flamencos de los maestros Otero y
Realito.
Ya de
madrugada se trasladaron los invitados al Kursaal, en uno de cuyos salones
altos continuó la «zambra» y la alegría hasta el amanecer.”.[60]
Chicuelo y Dora La Cordobesita.
En
Sevilla también fue requerido para otra fiesta similar: la del bautizo del
primogénito del gran torero rondeño Cayetano Ordóñez Aguilera ‘Niño de La Palma’
(1904-1961). Aquel niño, Cayetano Ordóñez Araujo (1928-1974), que seguiría la
senda de su padre con su mismo nombre artístico, había nacido el último día del
mes de octubre de 1928, por lo que el bautizo tendría lugar a inicios del mes
siguiente. En una entrevista realizada a Tomás Soto Torres ‘Tomás Torres’ (1903-1976)
para diario “Pueblo” de Madrid,
evocaba así aquel acontecimiento al recordar a su padre, el gran Manuel Torre:
“-En varias
ocasiones le escuché que el día que cantó más a gusto fué en el bautizo del
hijo mayor del Niño de la Palma. De Cayetanito Ordóñez, el hermano de Antonio,
que fué también matador de toros, y que creo que anda por América. Debió ser
por el año 28. Yo estuve en la fiesta. Aquel día se reunieron alrededor del
torero famoso lo mejor que por entonces había entre los flamencos de Sevilla:
el Niño Gloria, Mazaco, Curro de la Jeroma, el guitarrista Niño Pérez, Tomás
Pavón, Pepe Pinto, Miguel de Marchena y el Niño de Huelva, que yo me acuerde.
Había más".
Tomás Soto me
entrega el testimonio gráfico de la máxima jornada de su padre. El gitano
Manuel ocupa el centro de la fotografía. Con un pañalón de seda rodeándole el
cuello. Como gran figura. Incluso con mayor importancia que el anfitrión, que
este Cayetano Ordóñez Aguilera (Niño de la Palma), flor de la torería andante
por aquel entonces. (...).”.[61]
De izquierda a derecha: Pepe Torre, Manolo de Huelva
sujetando el sombrero, Tomás Pavón, detrás de él Tomás Torre y delante Pepe
Pinto, Niño de la Palma, Miguel de Marchena delante de él, Manuel Torre, Currito
el de la Jeroma, Paco Mazaco y El Gloria.
En
otra entrevista realizada poco antes de su muerte, Tomás Torre también
recordaba a Currito en sus otras facetas flamencas, su baile
y su personal interpretación de estilos al piano:
“...“Currito de
la Geroma” (...). Hijo de la famosa Geroma. Tomás, dice, era como un ángel
indio. Cantó corto pero con “voz morena”, tenía un toque de gracia y arte
inigualable, así su baile, y para colmo le arrancó al piano los sonidos más
“hondos” que se oyeran alguna vez en este instrumento. Con este arte, “rifao”
entre las mujeres, tenía que morir muy joven. (...).”.[62]
El gran guitarrista Esteban de Sanlúcar también comentó de él otra virtud desconocida:
“De los tocaores flamencos, para mí el más grande
de todos ha sido Sabicas... Manolo, el de Huelva. Y hubo un gitano que tocaba
muy bien, tocaba la trompeta, bailaba, cantaba, que era un tal “Currito de la
Geroma”.”.[63]
Otra instantánea con el diestro rondeño en el patio de
la antigua Venta de Antequera por la misma época. De izquierda a derecha: de
pie: Tomás Torre, Manuel Torre, Manolo de Huelva, Niño de La Palma, Niño Pérez
y El Gloria. Sentados Labioburra, La Malena, Paco Mazaco y Currito el de La
Jeroma.
Al
año siguiente, iniciado abril de 1929, oficiaba Currito de guitarrista junto a
su padre Juan el de Alonso para otra fiesta taurina; esta vez organizada tras
un almuerzo ofrecido en honor al diestro Joaquín Rodríguez Ortega ‘Cagancho’
(1903-1984):
“Un agasajo a Cagancho.-
Un grupo de
amigos íntimos obsequió anoche con una comida al genial torero Joaquín
Rodríguez «Cagancho». Tuvo lugar el agasajo en el restaurante del popular
Morillo, quién hizo un verdadero alarde en honor de «Cagancho» y sus amigos.
Joaquín sentó
a su lado a don Lorenzo Trujillo y a don Celestino Martínez, sus íntimos e
incondicionales admiradores.
No hay que
decir, que tratándose de «Cagancho», que, con la mayor intimidad cenaron con él
la flor y nata de los artistas flamencos: Cepero, Caracol, Mazaco, Pepe Azuaga,
Juan el Alonso, Currito el de la Jeroma...
Y también
buenos aficionados y personas de relieve, que al ambiente cordialísimo de la
casa de Morillo, pasaron un rato muy agradable al lado del inimitable artista
gitano.
El menú,
dispuesto por don Lorenzo Trujillo, –rey de los «gourmet»-, fué ilustrado con
su arte sobresaliente por el gran dibujante Juan Parrilla.
En resumen:
un rato, que desprovisto del molesto e insincero empaque de los banquetes,
resultó cordialísimo y simpático, y que terminó en fiesta que, acaso dure
todavía.”.[64]
El torero trianero Cagancho.
Algo
más de dos meses después, le encontramos actuando en Granada en un elenco
capitaneado por Manuel Vallejo. Junto a él, de guitarrista, aparece el ya
aludido Antonio El Tripa. En esta actuación, que tuvo lugar el sábado 15 de
junio de 1929, hacían su presentación el pontanés Juan García Ruíz ‘Niño
Hierro’ (1899-1987), el alcalareño Pedro José Bernardo Álvarez Pérez ‘Bernardo
de los Lobitos’ (1887-1969), Miguel López Triguero ‘Niño de Málaga’ (1910-1939),
y un cantaor apodado El Malagueñito al que no hay que confundir con sus
contemporáneos, uno hijo del Niño del Genil, el tocaor Antonio Sánchez Díaz
(1907-1959) -como descubrió nuestro buen amigo Miguel Ángel Jiménez Valverde-, ni
con el bailaor Paco El Malagueñito.
En página 3 de los ns.º 26.356 y 26.357 de “El Defensor de Granada. Decano de la Prensa
diaria de esta provincia”; ediciones de mañana y tarde del sábado 15 de
junio de 1929.
Con este mismo espectáculo de Manuel Vallejo durante
ese verano realizó una gira actuando entre otras ciudades en Barcelona, incluyendo
en el elenco a El Pena Hijo, la gran bailaora Carmen Amaya y el gran
guitarrista Ramón Montoya.[65]
Al
final de ese año Currito es nuevamente requerido para amenizar la fiesta que se
organizó por el bautizo de un hijo del novillero onubense Benito Durán Guerra
(1908-ca.1980), que tuvo lugar el sábado 14 de diciembre de 1929 en la llamada
‘Casa de los Artistas’. En esta ocasión acompañaría a la guitarra el cante de Antonio
Pérez Guerrero ‘El Sevillano’ (1909-1989) y de José Azuaga ‘El Limpio‘. Así lo
contó “El Noticiero Sevillano” tres
días después:
“Gacetillas de
la noche.- (...).
Un bautizo de
rumbo.
El sábado, en
la calle Viriato, y en el domicilio del valiente matador de novillos Benito
Durán Guerra, tuvo lugar una gran fiesta para celebrar el bautizo de su hijo el
monísimo niño Antonio Carlos Manuel.
El padrino,
nuestro querido amigo y distinguido oficial de Artillería don Carlos Amores, en
unión del aplaudido novillero y de su bellísima esposa doña Ana Pérez de Durán,
hizo los honores a la selecta concurrencia, obsequiándola espléndidamente con
vinos, pastas, licores y habanos.
Se bailó por
lo fino y por las clásicas sevillanas, y para que nada faltase, los amigos del
cante jondo y de la guitarra se extasiaron escuchando a “Currito el de la
Jeroma”, “Pepe el Limpio” y Antonio Pérez “El Sevillano”, ‘tocaor’ y
‘cantaores’, respectivamente que hicieron alarde de su arte tan difícil como
maravilloso. (...)..
La animación
no decayó hasta altas horas de la madrugada.”.[66]
El cantaor extremeño José Azuaga Morcillo ‘Pepe El
Limpio’.
Quizá una de las últimas actuaciones de Currito de La
Jeroma fuese en Mairena del Alcor según narra Antonio Mairena su libro “Confesiones”, bajo el título de “Aquella memorable noche mairenera del Niño de Jerez”, en la
que por mediación del entonces joven cantaor de los Alcores fue contratado el tocaor junto a Manuel Torre:
“En el verano de 1930, una Hermandad de Penitencia
de mi pueblo quiso dar un espectáculo de cante en un cine de verano de la
localidad, y me comprometieron para que organizara el cuadro de artistas.
Naturalmente, contraté a Manuel Torre, valiéndome de la amistad que tenía con
mi padre, y también al guitarrista Curro el de la Jeroma. Las
actuaciones serían por dos noches. Fue la última vez que yo escuché a Manuel
Torre”.[67]
Según explica acompañó a Antonio Mairena por
soleares y siguiriyas y a Manuel Torre en medias granaínas, soleares, siguiriyas y
cabales.
Finalmente Currito, el hijo de La Jeroma, falleció el sábado 6 de
septiembre de 1930 falleció en Sevilla, contando sólo 29 años de edad, como consecuencia
de la tuberculosis pulmonar, la misma enfermedad que, como vimos, acabó con su
tía segunda Geroma La Morenita (1865-1889), aunque la tradición oral achacaba su
prematura muerte a su bohemia. Así lo corrobora su certificado expedido al día
siguiente:
“Archivo Civil
de Sevilla.- Distrito de San Vicente.-
En Sevilla,
provincia de ídem, a las ‘diez’ y ‘treinta y siete’ minutos del día ‘siete’ de
‘Septiembre’ de mil novecientos ‘treinta’; ante D. ‘Antonio de Leániz y (...)’
y D. ‘Manuel Mellado y Mendoza’, Secretario ‘suplente’, se procede a inscribir
la defunción de Don ‘Francisco Leiton de las Heras’ de ‘veinte y nueve años’,
natural de ‘Jerez de la Frontera’, provincia de ‘Cádiz’, hijo de Don ‘-----’ y
de Doña ‘Gerónima-’ domiciliado en ‘calle Lumbreras número nueve’ de profesión
‘jornalero’ de estado ‘soltero’; falleció en ‘su domicilio’, el día ‘de ayer’ a
las ‘once horas’ a consecuencia de ‘tuberculosis pulmonar’ según resulta de ‘la
certificación facultativa’; y reconocimiento practicado, y su cadáver habrá de
recibir sepultura en el Cementerio de ‘San Fernando’.
Esta
inscripción se practica en virtud de ‘manifestación de Baldomero Álvarez Domínguez
mayor de edad, domiciliado en Juzgado siete como consignado para ello’,
consignándose además ‘que se ignora si ha otorgado testamento’; habiéndola
presenciado como testigos Don ‘Enrique Yañez López’ y Don ‘Francisco Ponce Díaz’,
mayores de edad y vecinos de ‘esta Ciudad’.
Leída este
acta se sella con el del Juzgado y la firman el Señor Juez, los testigos ‘y el
compareciente que certifica’.
‘Antonio de Leániz’
(rubricado). Baldomero Álvarez (rubricado).
‘E. Yáñez’
(rubricado). Francisco Ponce Díaz (rubricado)”.
Certificado de defunción de Francisco Leiton de las
Heras. Distrito de San Vicente.
(Registro Civil de Sevilla; domingo 7 de septiembre de
1930).
(Archivo Manuel Cerrejón Redondo).
Aquí
su certificado de sepultura:
Certificado de sepultura de Francisco Leiton de las
Heras.
(Cementerio de San Fernando de Sevilla; domingo 7 de
septiembre de 1930).
(Archivo Manuel Cerrejón Redondo).
“Como capellán
del Cementerio de San Fernando.- ‘381’.-
Certifico:
Haber dado sepultura al cadáver de D. ‘Francisco Leiton de la Hera’, hijo de D.
‘----’ y de D.ª ‘Gerónima’, natural de ‘Cádiz’ provincia de ‘Jerez de la
Ftera.’, de ‘29’ años, ‘soltero’ (...) que falleció de ‘tuberculosis
pulmonar’ en la calle de ‘Lumbreras’, número ‘9’; parroquia de ‘S. Lorenzo’ y
se inhumó en ‘la sepultura de 3.ª clase n.º 1572 Jesús del Gran Poder’.
Sevilla ‘7’
de ‘Setbre’ de 193‘0’.”.
El
diario “El Liberal” publicó su
necrológica dando curiosos datos sobre los gastos del sepelio:
En página 4 del n.º 10.919 del diario “El Liberal” de Sevilla;
Viernes 12 de septiembre de 1930.
Como la mayoría de los artistas flamencos de su tiempo
la precariedad económica del difunto Currito dejó en difícil y precaria
coyuntura a su viuda e hijos. Para paliar en lo posible tal situación se
organizó un nuevo beneficio el cual tuvo lugar el viernes 22 de mayo de 1931.
Entre los participantes compitieron los genios de Huelva, José Rebollo Piosa
(1895-1938) y Antonio Rengel Ramos (1904-1961) junto a Juan Luque Torres ‘El
Cojo Luque’ (1905-ca.1980), del que damos en primicia su nombre completo,
además de un émulo de José Cepero, posiblemente Ceperito, aunque con tal nombre
hubo en este tiempo dos cantaores homónimos: el jerezano Francisco Cepero y el
madrileño José Martínez. Así lo anunció la víspera el diario “El Liberal”:
“Una velada
benéfica.
A favor de
una viuda y cuatro pequeñuelos.
Mañana,
viernes, á las diez de la noche, se celebrará en el Centro de Reuniones
Familiares, Amor de Dios número 23, una velada á beneficio de la viuda y cuatro
hijos del que fue célebre tocador de guitarra Currito e1 de la Jeroma, muerto
en plena juventud.
El programa
es lo que ahora se denomina ópera flamenca, integrándolo lo más célebre del
género. Cinco bailaoras, entre ellas la Malena, el célebre Paco Senra y dos
cantaoras para el cuadro.
Después habrá
un concurso de cante flamenco, tomando parte los artistas Cepero II, Cojo
Luque, Pepe Rebollo y Antonio Rengel.
Fuera de
concurso actuarán Pepito Torres, El Pinto y la más célebre de las cantadoras:
Pastora Pavón (Niña de los Peines).
La «orquesta»
estará formada por los tocadores Paco el de Paradas, Pepe el de la Flamenca, Miguel
el de Marchena y el Niño de Ricardo.
Todos los
artistas toman parte en la velada desinteresadamente, y la entrada en el Centro
de Reuniones es por invitación.”.[68]
El matrimonio formado por La Niña de los Peines y Pepe
Pinto figuras destacadas del homenaje póstumo y benéfico a la viuda e hijos de
Currito el de La Jeroma.
(Fotografías de un programa promocional de coplas de
estos grandes artistas del año 1933.
Archivo José Expósito Ramos).
Paradojas
del destino Juan el de Alonso que nunca reconoció en vida a su hijo, admitió
ser su progenitor cuando Currito el de La Jeroma faltaba de entre los vivos.
Procuró Juan Vargas Jiménez que se conociera esta circunstancia y hiciera
público al notificar que corría con los gastos del entierro en los que también ayudó económicamente
la sin par Pastora Pavón Cruz gran amiga y admiradora del finado:
En página 5 del n.º 10.923 del diario “El Liberal” de Sevilla;
Martes 16 de septiembre de 1930.
Observamos
por el Padrón de Habitantes de finales de 1930 que Jeroma Leiton de Las Heras
estuvo domiciliada, desde que se asentó en Sevilla, en su casa de la calle
Lumbreras n.º 9, donde convivía con su hijo su nuera y sus nietos, contando a
la sazón los sesenta años de edad. Hogar ahora sumido en la tristeza sin el
cabeza de familia:
Padrón de Habitantes de Sevilla, 1930. Calle Lumbreras
n.º 9.
Calle Lumbreras, con el antiguo cuartel de la policía
armada en su desembocadura a la Alameda de Hércules. En la acera de la derecha
hacia atrás se encontraba el domicilio de Currito de La Jeroma y su familia.
Cinco
años después, según el Padrón de la ciudad de Sevilla de 1935 aún seguían
viviendo la madre, la mujer y los hijos de Currito de La Jeroma en el mismo
domicilio:
Padrón de Habitantes de Sevilla, 1935. Calle Lumbreras
n.º 9.
Como se especifica en una nota marginal del certificado de sepultura, los restos de Currito de La Jeroma se trasladaron el 16 de octubre de 1942 al osario común por impago
de sepultura. Veinte años después de su muerte seguía su familia morando en el mismo domicilio de la
calle Lumbreras n.º 9 con María Megía Silva como cabeza de familia. La Jeroma, madre del gran guitarrista y cantaor, aún vivía, próxima a cumplir los 81 años. Así constata su presencia el documento padronal del año 1950:
Padrón de Habitantes de Sevilla, 1950. Calle Lumbreras
n.º 9.
Hasta
aquí una revisión lo más exhaustiva posible del cantaor, tocaor, bailaor,
pianista e incluso trompetista flamenco Currito el de La Jeroma quien
desarrolló su arte y capacidades en el primer tercio del siglo XX
entre su tierra natal y Sevilla; ciudad que a tantos artistas jerezanos acogió
en su suelo.
Rafael
Chaves Arcos
[1] Hidalgo Gómez, Francisco: “Como en pocos lugares noticias sobre el flamenco en Barcelona”; Ed.
Carena. Barcelona, 2000, página 36. [2] El de Triana, Fernando: “Arte y artistas flamencos”; Imprenta Helénica. Madrid, 1935; página
158. [3] Luján y Fernández, Néstor: “«La Macarrona» y su época”; en página 15 de los ns.º 494 y 511 de
la revista ilustrada “Destino” de
Barcelona; ediciones del 4 de enero y 3 de mayo de 1947. [4] En
página 2 del n.º 1.945 del diario “
La
Provincia” de Huelva; sábado 30 de mayo de 1885.
[5] De La Plata, Juan: “Pequeña historia de los “cafés cantantes” que existieron en Jerez hace
medio siglo”; en páginas 7 y 15 del n.º 6.171 del diario “Ayer” de Jerez de la Frontera; sábado 12
de septiembre de 1953. Recogido en De La Plata, Juan: “Los Cafés Cantantes
de Jerez”; Ed. Cátedra de Flamencología, Jerez de La Frontera (Cádiz), 2007;
páginas 11 y 12. [6] Checa Medina, José Ramón: “El flamenco en la prensa de Jaén (1808-1939)”; Ed. Universidad de
Sevilla, 2023; páginas 310 y 311. [7] Rondón Rodríguez, Juan: “Recuerdos y confesiones
del cantaor Rafael Pareja, de Triana”. Ediciones Flamenco. Córdoba 2001,
páginas 41 y 42. [8] Rodríguez Cosano, Ricardo: “Cantaores de Lebrija en el recuerdo”; Edición de autor y patrocinio
del Ayo. de Lebrija y Mancomunidad de municipios del bajo Guadalquivir; página
22. También recogido en De la Plata, Juan: “La Pena Sonora.
Vida, cante y gloria de Manuel Torre”. Edición del autor, Caja de San
Fernando & Cátedra de Flamencología de Jerez, Jerez de la Frontera (Cádiz); 2002;
página 35. [9] De Hoyos y Vinent, Antonio: “Comentario.- Una Noche Azul Perfumada de Azahar... La Fiesta Gitana”;
en la página 6 del n.º 13.215 de “El Día.
Diario de la noche” de Madrid; miércoles 10 de enero de 1917. [10] Escribano Ortiz, Antonio: “Y Madrid se hizo
flamenco”. Ed. El Avapiés, S. A. Madrid. 1ª edición: abril 1990, página 80.
[11] Salvador Carrasco: “Una charla con “Pareja de
Triana”, la vieja figura del flamenco”; en página 5 del diario “Ayer”
de Jerez de la Frontera; miércoles 17 de Diciembre de 1952. [12] Rondón Rodríguez, Juan; obra cit. Córdoba 2001,
página 94. [13] En
página 2 del n.º 1.080 de “
El Noticiero
Sevillano. Diario independiente de noticias, avisos y anuncios”; martes 17
de marzo de 1896.
[14] ‘Viriato’: “Boda
de Rumbo”; en página 2 del n.º 3.570 de “La Publicidad. Diario de avisos, noticias y telegramas” de Granada,
y en portada del n.º 2.981 del diario “Las
Provincias de Levante” de Murcia; ediciones del viernes 20 de marzo de
1896. En portada del n.º 71 de “La
Derecha. Diario democrático” de Zaragoza y en la página 2 del diario “La Unión Mercantil” de Málaga; ediciones
del lunes 23 y martes 24 de marzo de 1896. Y en página 21 del n.º 101 del
semanario argentino “El Correo de España”
de Buenos Aires en su edición del domingo 2 de mayo de 1896. [15] Blas Vega, José & Ríos Ruíz, Manuel: Diccionario Enciclopédico Ilustrado del
Flamenco. Ed. Cinterco 2ª edic. Madrid 1990; página 14. [16] En
página 2 del n.º 17.883 de “
El Guadalete.
Periódico de interés general” de Jerez de La Frontera; sábado 9 de
septiembre de 1911.
[17] En página 30 el n.º 142 de la revista “Eco Artístico” de Madrid; sábado 25 de
octubre de 1913. El tocaor y concertista de guitarra José Crévola Benedito es
muy posible que fuese sevillano aunque viviera y ejerciera la mayor
parte de su carrera artística en Jerez de la Frontera. Acompañó a cantaores de la
tierra, caso de El Garrido de Jerez –como vimos en este blog-,
Francisco Santos ‘El Chuti’, Luisa Requejo, María Bernal, Isabelita de Jerez o
Adela López, y a artistas sevillanos que recalaban en la localidad, como del
Niño de las Marianas o el bailaor José Canela, haciendo con muchos de ellos
giras generalmente por Andalucía. También realizó duetos junto a otros
guitarristas, caso de Manuel López –en su faceta de bandurrista- a mediados de
noviembre de 1906 y desde 1913, y sobre todo a partir de 1915 junto a Javier
Molina bajo el nombre artístico de “Los Crevolinas”, donde exponían solos de guitarras combinando a veces la actuación de algún que otro cantaor,
con recitales en localidades como Écija, Puerto de Santa María y San
Fernando. En dicho año Pepe Crévola fue también representante artístico de los
duetistas Fernández y González. A partir de 1918 y durante más de una década
realizó extensas giras por el norte de España, Portugal, Extremadura y región
valenciana acompañando el cante de Peñita de Andalucía. De finales de agosto de
1930 son las últimas actuaciones recabadas en Higuera de la Serena, en pleno itinerario por tierras de Badajoz, actuando a veces en unión del cantaor
Joselito El Sevillano. En junio de 1934 aparece nuevamente en Jerez dirigiendo
elencos flamencos en el Teatro Villamarta, siendo su última actuación
localizada la que tuvo lugar en dicho escenario iniciado octubre de 1936 junto
a Javier Molina y Sebastián Núñez dentro de los actos realizados en el homenaje al general Gonzalo Queipo
de Llano. [18]
En página 3 del n.º 18.612 de “
El
Guadalete. Periódico de interés general” de Jerez de La Frontera, en su
edición del martes 13 de enero de 1914.
[19] En
página 2 del n.º 18.614 de “
El Guadalete.
Periódico de interés general” de Jerez de La Frontera; jueves 15 de enero
de 1914.
[20] En
página 3 del n.º 18.616 de “
El Guadalete.
Periódico de interés general” de Jerez de La Frontera; sábado 17 de enero
de 1914.
[21] Blas Vega, José & Ríos Ruíz, Manuel; obra cit. Madrid, 1990; página 382. [22] En página 31 del n.º 151 de
la revista “Eco Artístico” de Madrid;
domingo 25 de enero de 1914. [23] De La Plata, Juan: “Pequeña historia de los “cafés cantantes” que existieron en Jerez hace
medio siglo”; en páginas 7 y 15 del n.º 6.171 del diario “Ayer” de Jerez de la Frontera; sábado 12
de septiembre de 1953. Recogido en De La Plata, Juan; obra cit: Jerez de La Frontera (Cádiz), 2007;
páginas 10 y 11. [24] “El suceso de
esta madrugada”; en página 3 del n.º 20.120 de “El Guadalete. Periódico de interés general” de Jerez de La
Frontera; martes 28 de diciembre de 1915. [25] Don Braulio’: “Después
de un banquete a “Venturita”.- El brindis de un revistero”; en portada del
n.º 25.932 de “El Guadalete. Periódico de
interés general” de Jerez de La Frontera; domingo 20 de enero de 1935. [26] De La Plata, Juan; obra cit. “Los Cafés Cantantes
de Jerez”; Ed. Cátedra de Flamencología. Jerez de La Frontera (Cádiz), 2007;
páginas 39 y 40. [27] “Una gira”;
en página 2 del n.º 20.468 de “El
Guadalete. Periódico de interés general” de Jerez de La Frontera; miércoles
10 de enero de 1917. [28] El de Triana, Fernando: obra cit. Madrid, 1935;
página 192. [29] Prat, Domingo: “Diccionario
biográfico-bibliográfico-histórico-crítico de guitarras (instrumentos afines),
guitarristas, (profesores-compositores-concertistas-lahudistas-amateurs),
guitarreros, danzas y cantos, terminología”; Ed. Columbus-Ohio, Editions
Orphée. (Edición facsimil de la de Buenos
Aires (Argentina), Casa Romero y Fernández, 1934); página 112. [30] Rondón Rodríguez, Juan; obra cit. Córdoba 2001,
página 65. [31] Noel, Eugenio: “Señoritos
chulos, fenómenos, gitanos y flamencos”; Ed. Renacimiento; Madrid, 1919,
página 262. [32] Herrera Rodas, Manuel & Celaya, Francisco: “Con la vieja escuela: Manuel Oliver”;
Rev. “Sevilla Flamenca”n.º 46;
Diciembre de 1986; página 18. [33] Blas Vega, José: “Vida y Cante de Don Antonio
Chacón”; Ed. Cinterco, Madrid 1990; página 155. [34] En página 13 el n.º 393 de la revista “Eco Artístico” de Madrid; viernes 30 de
diciembre de 1921. [35] En página 13 el n.º 390 de la revista “Eco Artístico”, en su edición del sábado
15 de octubre de 1921. [36] Lafita Díaz, Juan: “El primer
día de velada”, en páginas 3 y 4 del
n.º 8.162 de “El Correo de Andalucía.
Diario católico de noticias” de Sevilla; domingo 25 de junio de 1922. [37] Cobo Guzmán, Eugenio: “Vida y Cante del Niño de
Marchena”; Ed. Virgilio Márquez Editor. Córdoba, 1990, página 24. [38]
En páginas 1 y 3 del n.º 22.287 de “
El Guadalete. Periódico de interés general” de Jerez de La Frontera; sábado 9
de septiembre de 1922.
[39] Cerrejón Redondo, Manuel & Franco Pelayo, Juan
Luis: “Manuel Vallejo. Vida y obra de una leyenda del flamenco”. Ed.
Ediciones Giralda. S.L. Sevilla 2002, página 61. [40] En
página 6 del n.º 8.299 del diario “
El
Liberal” de Sevilla; martes 10 de julio de 1923.
[41] En
página 2 del n.º 19.523 del diario regional de la noche “
La Provincia. Decano de la prensa de Huelva”; sábado 21 de julio de
1923.
[42] “El Concurso de
“Cante Jondo”.-”; en portada del n.º 19.525 de “La Provincia. Decano de la prensa de Huelva”; noche del lunes 23 de
julio de 1923. [43] Pepe de la Rábida: “Huelva. El concurso de “cante jondo”.-”; en página 3 del n.º 8.314
del diario “El Liberal” de Sevilla;
miércoles 25 de julio de 1923. [44] “En Huelva.-
Concurso de Cante”; en página 6 del n.º 959 de “La
Voz. Diario
independiente de la noche” de Madrid; martes 24 de julio de 1923. También
en página 4 del n.º 1.138 del diario “La
Libertad” de Madrid, en página 2 del n.º 23.661 del diario “La
Correspondencia de
España” de Madrid y en portada del diario “Informaciones” de Madrid; ediciones del miércoles 25 de julio de
1923. [45]https://www.huelvainformacion.es/huelva/Fandango-Huelva-Concurso-Cante-Jondo_0_1810321044.html
y
https://www.huelvainformacion.es/ocio/Cien-anos-Concurso-Cante-Jondo_0_1622239123.html [46] En
página 2 del n.º 8.687 del diario “
El
Liberal” de Sevilla; miércoles 1 de octubre de 1924.
[47] En página 5 del n.º 8.800 del diario “
El Liberal” de Sevilla; sábado 24 de
enero de 1925.
[48] En página 12 del n.º 1.899 y en
páginas 6 (y 3) del n.º 1.900 de “La Voz. Diario gráfico de información”
de Córdoba; ediciones
de mañana y tarde del martes 7 y miércoles
8 de abril de 1925. [49] Galerín: “El
Fomento del Arte Popular Andaluz.- La segunda fiesta en el Hotel Alfonso XIII.-”;
en la página 4 del n.º 8.881 el diario “El
Liberal” de Sevilla; sábado 18 de abril de 1925. [50] “Mayo Florido.-
De Cruz en Cruz”; en página 4 del n.º 8.913 del diario “El Liberal” de Sevilla; miércoles 20 de
mayo de 1925. [51] Ortiz Nuevo, José Luis: “En 1925 hubo en Sevilla
un Concurso de Cante Flamenco”. Ed. Bienal de Flamenco. Col. Miscelánea N.º
3. Sevilla, 2000; página 48. [52] En página 4 del n.º 9.074 del diario “El Liberal” de Sevilla; jueves 29 de
octubre de 1925. [53] En
página 2 del n.º 9.216 del diario “
El
Liberal” de Sevilla; martes 23 de marzo de 1926.
[54] En portada del n.º 9.513 de “El Correo de Andalucía. Diario católico de noticias” de Sevilla;
jueves 28 de octubre de 1926. [55] Cerrejón Redondo, Manuel & Franco Pelayo, Juan
Luis; obra cit: Sevilla 2002, página 137. [56] En
página 4 del n.º 10.172 del diario “
El
Liberal” de Sevilla; domingo 19 de febrero de 1928.
[57] En
página 2 del n.º 10.236 del diario “
El
Liberal” de Sevilla; martes 24 de abril de 1928.
[58] Domínguez Lobato Eduardo: “Andalucía al día.= ‘Esteban de Sanlúcar’.-”; en la página 29 del
diario “ABC” de Sevilla en su edición
del domingo 12 de febrero de 1984. [59] En
página 2 del n.º 12.350 de “
El Noticiero
Sevillano. Edición de la mañana” de Sevilla; miércoles 8 de agosto de 1928.
[60] En página 14 del n.º 3.332 de “La Voz. Diario gráfico de información” de Córdoba; jueves 1 de
noviembre de 1928. [61] “«Mi padre era
el «Joselito» del Cante»”; en página 9 del n.º 6.678 del diario “Pueblo” de Madrid; sábado 18 de febrero
de 1961. [62] “El buen gusto
de Cayetano Ordóñez”; en páginas 48 y 49 del n.º 21-22 de “Litoral.
Revista de la poesía y el pensamiento” de Torremolinos; miércoles 1 de
septiembre de 1971. [63] Torres
Cortés, Norberto: “Esteban de Sanlúcar. Maestro de la guitarra
flamenca. Sus principales obras escritas y digitadas por Manolo Yglesias”
de Ed. Acordes Concert, Madrid, 2003. [64] En
página 8 del n.º 12.553 del diario “
El Noticiero
Sevillano. Edición de la mañana” de Sevilla; jueves 4 de abril de 1929.
[65] Hidalgo Gómez, Francisco: “Como en pocos lugares noticias sobre el flamenco en Barcelona”; Ed.
Carena. Barcelona, 2000, página 156. [66] En
página 2 del n.º 12.773 del diario “
El
Noticiero Sevillano. Edición de la mañana” de Sevilla; martes 17 de
diciembre de 1929.
[67] Mairena, Antonio: “Las Confesiones de Antonio
Mairena” (Edición preparada por Alberto García Ulecia). Ed. Publicaciones
de la Universidad
de Sevilla. Col. de Bolsillo, N.º 53. Sevilla, 1976, páginas 67 y 69. [68]
En página 4 del n.º 11.173 del diario “
El
Liberal” de Sevilla; viernes 22 de mayo de 1931.